La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) de Castilla-La Mancha ha explicado que este año ha sido "muy malo para la aceituna y la economía familiar" debido a la merma de la cosecha en más de un 70 por ciento en la región, asegurando que en algunas almazaras de La Jara de Toledo la disminución ha llegado hasta el 90 por ciento.

En un comunicado, el secretario de Agricultura de UPA regional, Ramón Sáez, ha indicado que una menor producción "es la responsable de la crítica situación de muchas familias de Castilla-La Mancha" ya que, a punto de terminar la campaña de aceituna, una subida de precios "no compensará la enorme pérdida de producción, debida a la sequía de 2014".

Desde UPA Castilla-La Mancha se prevé que la cosecha se reduzca con respecto a la campaña 2013/4 en más de un 70 por ciento, pasando de 155.000 toneladas de aceite, a las 46.000 toneladas, en la campaña 2014/15. A su juicio, la bajada de producción contrasta con el aumento de la demanda exterior de aceite en mercados como el de EEUU con el que se han duplicado las exportaciones y que ha provocado que los precios suban.

"Sin embargo, al agricultor no le salen las cuentas porque los costes de producción son muy elevados y la cosecha se ha reducido demasiado", ha indicado el responsable de Agricultura de UPA, que ha hecho hincapié en que, aún así, la principal crítica de los agricultores es "la competencia desleal que sufren por parte de los grandes supermercados que tiran los precios", ha añadido.

En este sentido, UPA ha denunciado que a los agricultores les están comprando el aceite en origen virgen extra a más de 3 euros y los grandes distribuidores lo están vendiendo a pérdidas, en muchos casos a 2,08 y 2,12 euros.