La cementera suiza Holcim ha cerrado este lunes la venta de su fábrica integrada de Cemento en Gádor (Almería) y la planta de molienda de Yeles (Toledo) a la mexicana Cemex por 45 millones de euros, según informa la empresa en un comunicado.

Tras el cierre del acuerdo, Cemex operara estas dos instalaciones que cuentan con capacidad para producir 1,75 millones de toneladas de cemento, mientras que Holcim mantendrá activas el resto de operaciones que tenía en España hasta ahora.

En concreto, mantendrá su presencia en España con una capacidad de producción de 2,2 millones de toneladas de cemento, la correspondiente a sus plantas de Carboneras (Almería) y Jerez de la Frontera (Cádiz), además de sus actuales operaciones de árido y hormigón.

Asimismo, la empresa suiza prevé obtener un beneficio bruto de explotación (Ebitda) de unos 10 millones de euros anuales con esta actividad.

Esta operación se enmarca en una transacción llevada a cabo en tres países europeos. Así, en el resto del Viejo Continente Holcim ha adquirido las operaciones de Cemex en Alemania occidental mientras que vende la totalidad de su filial en la República Checa.

Cemex y Holcim anunciaron el pasado mes de octubre su decisión de no fusionar en una sola empresa los negocios con que cuentan en España, en contra de lo que las dos multinacionales del cemento acordaron y anunciaron en agosto de 2013, y se decantaron por esta compraventa de activos.

Las dos empresas atribuyeron la modificación del acuerdo al "cambio del panorama estratégico" registrado desde el anuncio de la propuesta de fusión y reestructuración de sus actividades en Europa, tanto por la propuesta de fusión de Holcim con Lafarge, como por la coyuntura del mercado.

En el caso de España, en vez de constituir una empresa conjunta, controlada en un 75% por Cemex y con el 25% de Holcim, las dos empresas han convenido en una compraventa de activos. Los términos del pacto en el resto de países se han ejecutado según lo previsto.