El PP vasco ha denunciado que la "permisividad" del Gobierno vasco con los denominados "muros populares", formados para evitar detenciones, deja a la Ertzaintza "desprotegida frente a quienes utilizan este actos de desobediencia para amenazar e insultar" a la Policía vasca.

La parlamentaria y secretaria general del PP vasco, Nerea Llanos, ha exigido la comparecencia en el Parlamento vasco de la consejera de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, ante la "exposición innecesaria" de los agentes en el operativo desarrollado el pasado lunes en Gernika para detención de Jone Amezaga, según ha indicado, "condenada a 18 meses de prisión por enaltecimiento del terrorismo".

Llanos ha destacado que agentes de la Ertzaintza han cuestionado "la idoneidad de un dispositivo desarrollado por ertzainas de paisano y a cara descubierta" en el Mercado de Gernika en un momento de "presencia abundante de personas", que tuvo que ser "reforzado posteriormente" con una Brigada Móvil.

"A través de las redes sociales, se distribuyeron imágenes de los agentes con insultos y amenazas directas", ha censurado la parlamentaria del PP, que ha insistido en que "es lamentable la indefensión de estos agentes".

Llanos ha denunciado, además, que "llueve sobre mojado" puesto que "se han producido hechos similares" en los últimos meses en "muros populares" en Ondarroa y en Deusto. A su entender, "con esta actitud reiterativa, el Gobierno vasco, lejos de disuadir este tipo de actos, los está alimentando".

"Desde este grupo ya hemos denunciado en otras ocasiones la forma en la que se están desarrollando las detenciones de condenados por la Audiencia Nacional, permitiendo que se formen los llamado 'muros populares', en un claro ejemplo de acto de desobediencia y de aliento a nuevos actos del mismo tipo porque los autores de dichos actos no son sancionados", ha subrayado.

En opinión de la dirigente popular, la consejera de Seguridad tiene que "dar explicaciones" sobre las circunstancias en las que se desarrolló esta operación, "a plena luz del día y en el momento de gran concentración de personas", que ya ha demostrado ser "fallida" en anteriores ocasiones y en la que los propios agentes han denunciado "no sentirse respaldados por la cúpula policial e, incluso, han llegado a insinuar un posible pacto político".