Los adictos a la cocaína que quieran abandonar su consumo y el temido síndrome de abstinencia y que no respondan con éxito a las terapias psicológicas tienen un motivo más de esperanza.

El Hospital de Sant Pau ensayará una vacuna contra la cocaína en la que participarán unas 150 personas enganchadas a esta sustancia, de Barcelona, Valencia y Madrid.

En el caso de que prospere en el próximo mes de septiembre el acuerdo final que han de suscribir los laboratorios que han sintetizado la vacuna y el grupo de doctores que debe coordinar el proyecto, éste se pondrá en marcha antes del próximo año. Y será el primero de estas características en Europa.

Los pacientes que prueben la vacuna lo harán durante un periodo de seis meses, tal y como ha explicado el responsable de la unidad de conductas adictivas del servicio de psiquiatría del Hospital de Sant Pau, José Pérez de los Cobos.

Alto riesgo de recaídas

La sustancia que se prevé testar genera anticuerpos en el organismo del paciente. Estos bloquean la droga en el momento de entrar en contacto con la sangre. De esta forma, el sistema inmune lucha contra la cocaína.

Este método que estudia el Hospital de Sant Pau es innovador porque un elevado número de adictos a la cocaína dejan las terapias de choque por el alto riesgo de recaída en su consumo.

Su consumo se duplica

El Observatorio Europeo de las Drogas constata que la utilización de cocaína en España se ha duplicado desde el año 1999 y que la tasa de prevalencia en la población situada entre los 15 y los 64 años es del 2%.

Esta cifra dobla a la europea, situada en el 1,1%, según dicho observatorio. Parte del éxito de esta droga se debe a la imagen mitificada que le otorgan los jóvenes.