El coordinador de la unidad especial de la Policía italiana contra el terrorismo (DIGOS) en Milán continúa hoy testificando.

El agente italiano aseguró ayer lunes que en una conversación grabada a Rabei Osman el Egipcio, éste culpó del 11-M al ex presidente del Gobierno José María Aznar, "por el apoyo que había dado al presidente Bush", en relación a la participación de España en la guerra de Irak en 2003.

"Rabei Osman tuvo una reacción muy violenta a nivel verbal y empezó a insultar a (Silvio) Berlusconi y también habló contra (George) Bush, justificando los atentados de Madrid.

En su delirio dijo que la culpa la tenía el presidente Aznar por el apoyo que había dado al presidente Bush (en la guerra de Irak)", manifestó el testigo al relatar la conversación que el procesado mantuvo, el 5 de junio de 2004, con su amigo Yahía Mouad Mohamed Rajah en el piso en la que ambos vivían.

Participación en los atentados

El coordinador de la DIGOS también ha explicado que el "26 de mayo de 2004, Rabei reconoció a su discípulo que el atentado de Madrid había sido un proyecto suyo, y los muertos en Madrid, los mártires, eran amigos suyos".

Los dos miembros de la DIGOS que delararon ayer lunes —uno de los cuales ha continuado hoy— fueron, precisamente, los encargados de detener al al Egipcio el 7 de junio de 2004 en Milán en una compleja operación que se inició a finales de marzo de 2004.

Información desde España

"Recibimos información por parte de la policía española, que nos comunicaba un número de móvil italiano, una tarjeta SIM italiana, encontrada en manos de uno de los acusados en el atentado —Foaud el Morabit— y asociada con el Egipcio".

Según el agente, el tráfico de la tarjeta apuntaba a Milán: "Esta tarjeta había sido cargada y recargada por un ciudadano egipcio con nombre Belal Gazdi", matiza el agente.

La escucha del teléfono —autorizada por un juez, tal y como han matizado los dos agentes italianos—permitió saber que el teléfono lo usaba el propio Rabei Osman, y que vivía en el apartamento de Vía Cadore (Milán): "Trabajaba como pintor", afirma el agente italiano, quien ha matizado que Rabei llevaba "una vida muy reservada" y que salía de casa casi sólo para ir a la mezquita de Milán.

Micrófonos en la vivienda

El Egipcio llamaba a diversos países: —Bélgica, España, etc.—. "Hablaba mucho con Fouad el Morabit", asegura el policía italiano.

Una autorización del fiscal de Milán permitió instalar dos micrófonos en esa vivienda de Vía Cadore, pero en junio se trasladó a Vía Caserini: "También pudimos instalar micrófonos allí y un sistema de vídeo, que sirve para asociar las voces con los personajes", asegura el agente.

Esto permitió controlar a Rabei durante las 24 horas del día.

Conversaciones grabadas

Todo el material que se grabó del Egipcio se trasladó al soporte informático. "Íbamos grabando en tiempo real", recuerda el agente, quien ha matizado que "hacía falta tiempo para que los intérpretes tradujeran las conversaciones, lo que llevaba un par de horas".

Para esta labor, los intérpretes —disponibles las 24 horas del día— contaban con la ayuda del segundo de los agentes que ha declarado hoy:  "Yo estaba presente ayudando a los intérpretes del árabe", asegura el segundo de los agentes italianos que ha declarado hoy y que ha matizado que en muchas ocasiones era menester "descifrar las conversaciones".

Una vez traducidas, las conversaciones se pasaban al papel y se le comunicaban al fiscal: "Todo era automático", matiza el segundo de los policías italianos, quien ha asegurado que no fue difícil identificar la voz de Rabei, porque quienes sí que lo conocía "nos indicaron en un primer momento quien era" —según el segundo de los agentes italianos que ha declarado—.

Diálogos con el joven Yahía

Las primeras conversaciones con su amigo Yahía Mouad Mohamed Rajah se produjeron en mayo, y se producían a diario: "El Egipcio se mostraba reservado cuando no estaba a solas con Yahía", asegura el agente.

Rabei enseñaba a Yahía a rezar y los principios más radicales del Islam: "Hablaban de Yihad, de martirio y enseñaba vídeos de propaganda radical muyahidin, cintas con mártires y sacrificios por Dios [...], era una labor de manipulación constante, lo que llevó al joven a estar dispuesto al martirio a través de un suicidio", afirma el testigo.

Páginas yihadistas

El Egipcio, al contrario de lo que dijo en su declaración, "utilizaba constantemente internet como experto a través de la línea de fibra óptica Fast Web [...], veía páginas yihadistas y radicales, y encontramos en su interior muchos archivos yihadistas próximas a Al Qaeda o algunas otras organizaciones", asegura el testigo, quien asegura que el Egipcio es "experto en explosivos".

El procesado también consultó páginas en las que se explicaban cómo construir bombas y cómo conectarlas con un maletín y activarlas a través de un teléfono móvil: "Vimos fotos que  se había bajado de internet", asegura el agente.

Rabei Osman llegó a hacer una prueba para varias personas mientras se conectaba a la página http://www.opm2.com/: "Esta página permite conectar teléfonos de la marca Nokia y enviar SMS simultáneamente", matiza.

Código secreto

El 12 de abril, Rabei y Mourat Chabarou —que hablaban a menudo sobre lo sucedido en Madrid, según ha explicado el segundo de los agentes italianos que ha declarado hoy— se pusieron de acuerdo en un código propio: "Una llamada quería decir que Mourat estaría en Belgica [...], dos llamadas quería decir que Mourat saldría y haría una acción suicida como mártir", afirma el agente.  De hecho, luego se confirmó este extremo cuando se halló el testamento de Mourat en su vivienda de Bélgica. "El propio Rabei quería hacer este viaje de mártir", matiza el testigo.

Mohamed, de París, también estaba "dentro de este proyecto": "En este contexto de diálogo, el 24 de abril de 2004 Rabei se refiere a los atentados de Madrid, diciendo que Mourat está con Dios  [...], esta es la primera referencia al 11-M, y también anunciaba otro proyecto de atentado", afirma el testigo.

Rápidamente, se activaron otras medidas de control en otros países, como Bélgica, "y avisamos a las autoridades españolas y belgas", reconoce el policía italiano.

Otra importante conversación

El 26 de mayo a las 19.41 h., los servicios de observación detectaron otra importante conversación entre Rabei y Yahía.

"Rabei hablaba de yihad, hablando a su discípulo reconoció que el atentado de Madrid había sido un proyecto suyo, y los muertos en Madrid, los mártires, eran amigos suyos", afirma el agente.

En otra convesación, Rabei entregó una cinta a su discípulo fomentando la yihad: "Rabei le dijo a su discípulo que esta era la cinta que escuchaban los jóvenes de Madrid para ganar al miedo", asegura el policía. Esta cinta fue intervenida por la policía posteriormente "cuando capturamos a Yahía [...], era una sermón que se llamaba el Cortejo de los Mártires, cinta de propaganda militar de la época de los muyahidines bosnios, a mediados de los años 90", explica el agente italiano.

Esta cinta, de hecho, fue incautada "en otras ocasiones" a "otros islamistas radicales".

En esta actividad de enseñanza de la doctrina a su discípulo, Rabei mostró un vídeo del degollamiento de Nicolas Berg, que Rabei había recibido en su correo electrónico: "Lo vio junto a Yahía, y Rabei lo comentaba en términos muy duros: mata a este perro, mata a este infiel [...], esto lo escuchamos en directo, porque los micrófonos estaban en la vivienda de Vía Cadore", asegura el testigo.

11-3-1970

"Según el Corán, el número 70 es una sura del Corán muy querida por los yihadistas [...], pensamos que había algún tipo de símbolo en esa fecha", asegura el policía.

En la segunda vivenda de Milán del Egipcio, en Vía Caserini, había un trozo de papel que ponía 11-M de 2004, y una inscripción en árabe que ponía "explosivo mártir" en árabe.

Micrófonos en la celda

Una vez en prisión, se volvieron a introducir micrófonos en la celda de Rabei: "Interceptamos una conversación con Yahía, en la que Rabei dice a su discípulo que no le traicione y que no divulgaría las confidencias hechas con anterioridad", asegura el agente.

"Se refería a las confidencias sobre el atentado de Madrid [...], también le decía a su discípulo que saldría pronto de la cárcel, pero que a él le habían relacionado con el 11-M y que le condenarían a 30 años", afirma.

Veneno

El agente italiano asegura que Rabei Osman le habló a su discípulo de que Al Qaeda contaba con una sustancia venenosa que podía contaminar el aire.

"No sé si eran armas no convencionales, pero sí que hay experiencias en Afganistán del uso de cianuro como gas", afirma el agente.

Según el policía, Rabei habló a su discípulo de utilizar un secador de pelo como medio de difusión de este veneno.

Relación con otros procesados

La agenda encontrada a Rabei Osman tenía un gran número de contactos en España: Ghalyoum, El Morabit, Faisal Aloush, el Turco, el Sudanés, Almallah Dabas, el Tunecino —a quien el Egipcio denominó el enseñante de todo—, etc.

También tenía contactos en el resto de países de Europa, relacionados con el terrorismo internacional: "Encontramos un número alemán utilizado entre 2002 y 2003 por un extremista egipcio, uno de los miembros más influyentes de la yihad y condenado en su tierra a trabajos forzados", asegura el testigo.

Sigue el juicio del 11-M en el especial de 20minutos.es