El Gobierno dice que no puede imponer que los contratos de compra-venta de leche cruda tengan una duración de un año si los ganaderos renuncian expresamente a ello, cosa que está sucediendo entre productores que "prefieren buscar otros compradores que puedan ofrecer sobre la marcha precios más interesantes", aunque recomienda al sector la firma de contratos anuales referenciados a algún índice oficial de precios.

Así lo señala en respuesta a la portavoz del BNG en el Congreso, Olaia Fernández Davila, quien el pasado mes de abril pidió al Ejecutivo que abriera una investigación para detectar abusos de la industria sobre los productores a la hora de "imponer condiciones" en la contratación de la leche, y que fijara medidas de control que "funcionen verdaderamente".

Aunque la pregunta parlamentaria se registró cuando Miguel Arias Cañete era aún ministro del ramo —una semana antes de su elección como candidato del PP a las elecciones europeas—, la respuesta del Ejecutivo está fechada un mes después de que la actual ministra, Isabel García Tejerina, accediera al cargo.

En el texto, que recoge Europa Press, el Gobierno hace un balance "positivo" de la implantación del contrato obligatorio, que ya utilizan "la gran mayoría de las empresas" que compran leche cruda. De hecho, según datos del 31 de enero de este año, el 74,1% de los ganaderos lácteos venden con contrato, una cifra que supone una caída con respecto al 90% del trimestre anterior, pero que el Ministerio espera que se incremente de forma "significativa".

Contratos por pocos meses

No obstante, el Ejecutivo reconoce que muchos de estos contratos se envían al registro fuera de plazo y que existen productores sin contrato o con contratos de muy poca duración, pero asegura que estos operadores son precisamente el objeto prioritario de los controles regulados en el Plan Nacional de Controles de Contratos en el Sector Lácteo, que supone cruzar las bases de datos relativas a todos los compradores registrados.

Admite también que existen contratos de duración inferior a los doce meses, y que esta tendencia se ha ido incrementando según mejoraban los precios de la leche cruda. "Al Gobierno le preocupa esta evolución, que reduce la posibilidad del contrato de actuar como elemento de estabilidad y permanencia en las relaciones entre productores y compradores", añade.

En cualquier caso, recuerda que el decreto que traspone a la normativa nacional el llamado 'Paquete Lácteo' europeo reconoce que el productor puede rechazar por escrito esa duración mínima de un año, y dice que aunque se dan casos en los que esta opción se elige por "debilidad del productor", en el momento actual de "precios elevados" es en muchas ocasiones el ganadero el que "no se está mostrando interesado en vender su producción a largo plazo".

"Prefiere recibir un mayo pago a día de hoy que establecer unas relaciones a plazo más largo con precios que aunque ahora mismo no le resulten tan beneficiosos sí le garantizarían una mayor estabilidad futura de los mismos", insiste el Ministerio, que dice que este sistema de "contratar mes a mes a la espera de mejoras en los precios no es positiva para ninguna de las partes, que tienen que convivir con la incertidumbre".

Por eso, recomienda el uso de contratos "a largo plazo" con "precios indexados en función de la evolución del mercado" como "mejor solución para ambas partes", y recuerda que ya existen varios índices de referenciación que se pueden utilizar. De hecho, el Gobierno considera que este sistema es mucho más útil para conjurar la "elevada volatilidad" de los precios de la leche que ha sido la tónica general de los últimos años.

"Con su utilización no se registrarían bajadas tan acusadas de precios cuando la tendencia sea alcista ni tampoco subidas tan extremas cuando la tendencia sea descendente", insiste el Ejecutivo, apuntando que "es fundamental" que las organizaciones de productores se desarrollen más y sean "más activos" en la negociación de contratos para que los acuerdos "se realicen en igualdad de condiciones".

Modificación del '

Paquete lácteo'

Por otra parte, Agricultura asegura que "próximamente" modificará el decreto de 2012 que regula la aplicación en España del llamado 'paquete lácteo', en el que se establecen las condiciones de contratación, para "mejorar las deficiencias detectadas en el sistema de contratación obligatoria".

En este sentido, abunda en que se "endurecerán las condiciones en las que se lleva a cabo la contratación para evitar las posibles prácticas que pretenden relegar los contratos a un simple papel que establece unas determinadas condiciones para cumplir la legislación mientras de manera paralela se aplican unas condiciones diferentes".

Fin del sistema de cuotas

Finalmente, en respuesta a otra pregunta del portavoz socialista de Agricultura en el Congreso, Alejandro Alonso, el Gobierno asegura que la nueva Comisión Europea (CE) abordará un "debate en profundidad" durante los seis meses de Presidencia italiana sobre los "principales retos que el sector lácteo debe encarar a corto, medio y largo plazo" y también sobre la "necesidad o no de instrumentar medidas adicionales a las ya existentes en la nueva Política Agraria Común (PAC) para prevenir y afrontar posibles graves crisis futuras" de este mercado.

En este sentido, el Ejecutivo recuerda que las instituciones comunitarias se han comprometido a seguir buscando "alternativas para una futura monitorización y gestión del mercado lácteo tras la eliminación de las cuotas".

Además, señala que el Ministerio de Agricultura ya publica mensualmente un 'Informe de Monitorización y Seguimiento de la Producción del sector vacuno lechero' donde se recogen datos sobre la evolución productiva del sector (producción, entregas, censo, reposición, etcétera) que, hasta el final del régimen de cuotas, arrojen un dibujo exacto de la realidad del sector en España y permitan "anticipar alguna actuación" que pueda ser necesaria. De hecho, también incluye simulaciones de la posible evolución.