Un avión de las Fuerzas Aereas de Estados Unidos realizó el pasado 17 de marzo un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de El Prat (Barcelona) tras detectar su tripulación un fuerte olor a gasolina en la cabina y considerar que podría existir riesgo de intoxicación.
El olor venía de una leve pérdida de combustible de una de las máquinas excavadoras que el avión transportaba desde Alemania a la República de Mali, en África, según ha confirmado el aeropuerto barcelonés. La aeronave transportaba maquinaria agrícola.
Una vez el tierra se activó el protocolo de emergencia correspondiente y el personal de Aena inspeccionó el avión para localizar el origen del olor.
La aeronave militar permaneció en El Prat seis horas, hasta que se solucionó el incidente, y luego siguió hacia su destino.
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