El juez José Antonio Vázquez Taín ha apostado por una ley de protección de datos que se centre más en las grandes empresas y el control de cómo manejan determinadas bases.

"Las grandes multinacionales tienen como herramientas bases de datos que utilizan de manera totalmente incontrolada y que ni siquiera el Estado puede meterles mano", ha señalado este viernes en Zamora, donde ha pronunciado una charla en el salón de actos del Consejo Consultivo sobre "La protección de datos en el proceso civil y penal".

Para el magistrado, la actual ley está "enfocada" sólo al pequeño y mediano empresario, al particular "que tiene un pequeño archivo de sus clientes, mientras que se está ignorando fenómenos tan masivos como los de Internet, donde se puede llegar a infringir una vulneración masiva de la intimidad de las personas", ha subrayado. Por eso ha lamentado que en la actualidad "se crea que con castigar al pequeño empresario e imponerle medidas se está protegiendo la intimidad, cuando por otro lado se consiente, permite o ignora violaciones diarias masivas".

Según su opinión, no es "un imposible" controlar este fenómeno en algo tan amplio como es Internet. "Existen formas de control. Los servicios secretos estadounidenses lo controlan todo y si lo pueden hacer para defender al Estado, cómo no van a poder para defender al ciudadano. Ahora hay que saber las leyes que queremos tener, de protección de las grandes multinacionales o de protección del individuo como persona", ha sopesado.

En este sentido ha tomado como ejemplo que si es posible saber si se utiliza Internet para promocionar el terrorismo "también se puede saber para, por ejemplo, se trafica con pornografía infantil, con estupefacientes o si se está entrando en la intimidad de las personas", ha enumerado. "Tecnológicamente, hay medios, aunque quizá sean caros. Ahora ha que valorar si es rentable intentar proteger al ciudadano", ha señalado.

A este respecto, por último, el juez Vázquez Taín ha valorado la sentencia que se hacía firme esta semana sobre el derecho al olvido de un ciudadano español frente a Google. "Es un pequeño paso, pero habría que ir un poco más allá. Determinados datos de materias específicas tienen unas bases que deberían no ser libres ni estar fuera de control, sino tener a alguien detrás que las dirija, corrija y actualice. Todavía queda mucho camino por recorrer", ha finalizado.