El agente 80.447 acudió a la estación de Alcalá de Henares después de que le avisasen de que habían hallado un vehículo sospechoso.

"La zona ya estaba acordonada cuando llegamos (...), me dijeron que la furgoneta estaba sustraída y que un conserje había visto a tres personas sospechosas", asegura.

Jefe de estación

El testigo ha reconocido que en un primer momento no pensó que la furgoneta tuviera que ver con los atentados, si bien al hablar con el jefe de estación de Alcalá empezaron a cuadrar las horas con las explosiones.

"Ya había indicios para pensar que había algo raro", asegura el testigo policial, quien ordenó revisar todas las cámaras de los alrededores.

El testigo, quien vio cómo se inspeccionó la Kangoo, ha descrito como se apalancó y como trabajaron los perros. "La ventanilla era opaca, no se veía el interior", asegura.

Sigue el juicio del 11-M en el especial 20minutos.es