El gol de cabeza de Palop frente al Shakhtar provocó un grito de alegría en Sevilla. El bombo del sorteo de cuartos de final, un sobresalto. El choque contra el Tottenham se jugará el jueves 5 de abril, o lo que es lo mismo, el Jueves Santo.

Ese día, desde las 12 del mediodía hasta bien entrada la tarde del viernes, cientos de miles de personas abarrotan todas las calles del centro de Sevilla, en especial durante la madrugada, para contemplar la procesión de hermandades como el Gran Poder, la Macarena, la Esperanza de Triana...

La preocupación por la posible llegada de miles de 'hooligans' ingleses, famosos por su indiscriminado consumo de alcohol y por sus actitudes violentas, acompañando al Tottenham en plena noche de 'bullas sevillanas' preocupa y mucho de esta misma mañana a los responsables de la ciudad. Peor aún, ya

Las conversaciones se sucederán en los próximos días, pero, al menos, ya se ha confirmado que el número de efectivos de Policía Local y Policía Nacional en las calles se incrementará considerablemente.

Incluso, se baraja la posibilidad, alegando problemas evidentes de seguridad, de hablar con los dirigentes del Sevilla para que trasladen a la UEFA la idea de cambiar la fecha del partido. También se contempla una reunión con Scotland Yard para tratar de organizar un dispositivo de seguridad común que comience en Londrés y termine en Sevilla.

Desde el Consejo de Cofradías, en boca del secretario Joaquín de la Rosa, se asegura que "estamos muy preocupados, pero tenemos plena confianza en que tanto en el Ayuntamiento como en la suddelegación del Gobierno tomarán las medidas necesarias para que no ocurra nada".

Mientras, el concejal de Gobernación, Francisco Fernández, comenta que "aún es pronto para tomar decisiones, pero está claro que habrá que ampliar y potenciar todos los dispositivos de seguridad".