La media de muertes violentas ocurridas en España es de una por cada 100.000 habitantes censados. En la provincia de Alicante asciende a 1,7; esto es, casi el doble que en el resto del país.

El motivo de este desajuste de cifras en la provincia es, según el Instituto de Medicina Legal, el asentamiento de población flotante y de extranjeros no censados.

Algo parecido ocurre con la proliferación de mafias aquí, como ya ha publicado 20 minutos, y que eligen esta provincia por la proliferación de urbanizaciones laberínticas en la costa.

Ésta ha sido una de las conclusiones de la memoria anual del Instituto de Medicina Legal, que ayer presentó en Alicante el conseller de Justicia, Miguel Peralta. Los forenses alicantinos realizaron el año pasado 934 autopsias y descubrieron que en 500 casos habían sido muertes violentas.

Por partidos judiciales, donde más muertes se han registrado ha sido en Alicante (218), seguido de Elche (112) y, a muy corta distancia, Orihuela (110).

El número de homicidios que se ha registrado en 2006 ha sido de 25, 17 hombres y ocho mujeres; en total, cinco menos que el año anterior.

Se han registrado siete muertes dentro del ámbito familiar. Los supuestos agresores han sido tres hombres y una mujer, un hijo (en dos casos) y un hijastro.

Como dato positivo, se produjo un descenso del 28,7% en las agresiones sexuales, pasando de 139 en 2005 a las 99 del año pasado.

‘Fitipaldis’, pero no a 200 km/h

Representantes de Tráfico comunicaron a la Fiscalía de Alicante que en la provincia no se sobrepasan límites de 200 kilómetros por hora, aunque mostraron su preocupación por los conductores que circulan bajo los efectos del alcohol. Los forenses alicantinos dijeron que se produjeron 6.714 accidentes de tráfico en 2006. Y los calificaron según la posición que las víctimas ocupaban en el vehículo: conductor vehículo (47%), ocupante (25%), conductor de motocicleta (18%), ocupante de moto (4%) y peatón (6%).