Los investigadores del Hospital Universitario Miguel Servet de Zaragoza que habían solicitado este miércoles, 2 de abril, mujeres voluntarias para un trabajo destinado a encontrar la dieta proteica ideal para adelgazar han cubierto el cupo un día después y ya no admiten más solicitudes.

Asimismo, han agradecido la colaboración ciudadana y la "respuesta inmediata" suscitada tras el llamamiento. Además, "ante la afluencia masiva de candidatas", el equipo de investigación "ya está realizando la selección adecuada según los perfiles precisos para el estudio", según ha informado el Departamento de Sanidad, Bienestar Social y Familia de Aragón en una nota de prensa.

Ha agregado que se ha anulado la reunión de puertas abiertas que se había previsto para el jueves 10 de abril, a las 19.00 horas, para explicar el proyecto. En su lugar, el equipo contactará vía correo electrónico con quienes hayan enviado los mensajes, para convocarlas a una reunión indicando día y hora y no se atenderá a nadie que no esté citada.

El proyecto de investigación va a comparar tres tipos de dietas con aproximadamente entre un 20, 30 y 35 por ciento de las calorías procedentes de proteínas en cada grupo, cuando la alimentación normal suele estar compuesta por un porcentaje de proteínas que ronda el 15 por ciento.

En este sentido, los investigadores han señalado que "está demostrado que las dietas proteicas ayudan a perder peso y nosotros queremos saber cuál es el porcentaje ideal de proteínas para ello". Los tres regímenes que van a investigar serán fáciles de cumplir por parte del usuario y para evitar las altas tasas de abandono, al tiempo que sea efectivo en la pérdida de peso.

CONDICIONES

Las participantes deben ser mayores de 18 años, no padecer enfermedades graves, ni tomar fármacos contra el colesterol o la diabetes; presentar obesidad o sobrepeso con un índice de masa corporal superior a 27,5 y estar dispuestas a cumplir las indicaciones que les den los médicos y nutricionistas durante los próximos tres meses.

A estas voluntarias se les facilitarán unos menús cada quince días e incluso se les aportará gratuitamente la carne, principal aporte de las proteínas. Los estudiosos les realizarán controles antes y después de este periodo y mantendrán una supervisión médica cada dos semanas.

El trabajo, respaldado por el Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud, ha sido aprobado por el Comité Ético de Investigación Clínica de Aragón y cuenta con financiación de la Unión Europea.