La joven segoviana Alba Martín Casado, dedicada al soplado de vidrio, ha ocupado el primero de los seis talleres habilitados por el Ayuntamiento de Segovia en la antigua Fábrica de Borra, en el barrio de San Lorenzo, donde se ubica un vivero de oficios.

El objetivo de estos talleres es facilitar el despegue y la consolidación de pequeñas empresas en la ciudad. En un nuevo proceso de adjudicación, el Consistorio pone a disposición otros cinco pequeños espacios para utilizarlos como talleres de oficios. Su tamaño ronda los 30 metros cuadrados y el arrendamiento mensual oscila entre los 215 y 240 euros (sin IVA) al mes, según el tamaño. Los contratos son de dos años prorrogables por otros dos.

Además de los talleres profesionales, los emprendedores tendrán a su disposición, en el mismo recinto, espacios y servicios comunes, como sistemas de alarma, mantenimiento y limpieza de zonas exteriores y uso de las aulas de formación del Centro de Iniciativas de Empleo y Empresas (CIESS) de San Lorenzo.

La intención, según explican fuentes municipales, es ofrecer a las empresas la infraestructura adecuada y servicios asociados para incrementar sus posibilidades competitivas en los primeros años de creación.

El primer taller que abre sus puertas, el de vidrio soplado, ha requerido trabajos previos de acondicionamiento e instalación de los hornos. En él se trabajará el vidrio soplado de la manera tradicional, pero incorporando los diseños más contemporáneos que la joven artista ha desarrollado durante sus once años de experiencia adquirida en España e Inglaterra. Este fin de semana el taller-tienda acogerá demostraciones de la actividad de esta profesional del vidrio.