El grupo parlamentario MÉS ha constatado que la Conselleria de Educación "mantiene todos sus esfuerzos al controlar, perseguir y atemorizar a los docentes para que acaten ciegamente la disciplina del Govern", obviando el derecho que los ampara "de renunciar un cargo docente que habían asumido libremente".

Así lo han apuntado desde la coalición "ante las nuevas actuaciones de la Conselleria para investigar si puede haber ninguna irregularidad sancionable" en las cartas de dimisión de los jefes de departamento de los centros educativos.

El diputado Nel Martí ha instado la Conselleria "a parar la obsesión enfermiza de perseguir a los docentes, y a trabajar para evitar el que ya parece inevitable: que el curso 2013-2014 sea un curso perdido para muchos alumnos en varias materias", debido, según ha apuntado, a la implementación del Tratamiento Integrado de Lenguas "contra toda razón y contra toda la comunidad educativa".

En un comunicado, Martí ha lamentado la actitud de la consellera, Joana María Camps, "que, "en lugar de tomar medidas para acercar posiciones y acabar con un malestar que hace imposible la tarea educativa, convierte cualquier discrepancia en un motivo de confrontación objeto de expediente y sanción".

Por su parte, la diputada Fina Santiago ha subrayado que "cualquier persona sensata, ante 131 dimisiones, entendería que tiene un conflicto serio" e iniciaría una estrategia encaminada a solucionar el problema.