Los agentes se personaron en el domicilio familiar, y cuando estaban comprobando las heridas de la víctima, el acusado se presentó en la casa.
El hijo, sin importarle que la Policía estuviera delante, la emprendió a golpes de nuevo contra su padre.
El hijo, sin importarle que la Policía estuviera delante, la emprendió a golpes de nuevo contra su padre.
El agresor, de 23 años, fue detenido y la víctima tuvo que ser trasladada al centro de salud de Ondarroa, donde le curaron sus heridas.
El segundo caso de violencia doméstica ocurrió a la una de la madrugada de ayer en Vitoria. En esta ocasión, la Ertzaintza detuvo en el barrio de Ariznavarra a un hombre de 39 años acusado de agredir y amenazar de muerte a su novia.
La Policía llegó al domicilio de la mujer después de que ésta les llamase pidiendo socorro. Cuando los agentes se presentaron en el piso, el hombre aún seguía en su interior. Según denunció la víctima, el presunto agresor había entrado por la fuerza en su casa.
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