El presidente del comité de empresa de Puleva en Alcalá de Guadaíra (Sevilla), Guillermo Díaz, junto a la secretaria general de la Federación Agroalimentario de CCOO-Sevilla, Mónica Vega, y su homólogo en UGT-Sevilla, Francisco López, han advertido este viernes de los "engaños" que está realizando Lactalis (Puleva) a los trabajadores, a la Administración andaluza y a los ciudadanos con el anuncio de cierre de la planta alcalareña.

Así, Díaz se ha quejado de que la empresa Lactalis quiera cerrar esta planta sevillana cuando aún tiene "ayudas vivas" concedidas por las administraciones públicas y ha recordado que la empresa recibió "dinero de los andaluces", en concreto tres millones de euros, para "comprar maquinaria moderna", que ahora Lactalis plantea llevarse de Alcalá de Guadaíra "a sus fábricas de la India y Rusia".

"Algo similar ocurrirá con la producción de las leches de omega y calcio, cuyas investigaciones fueron sufragadas con dinero público y que, ahora, también se irán hasta estos países", ha subrayado.

Además, ha señalado que "la productividad y la rentabilidad tampoco pueden ser excusas para cerrar esta fábrica", ya que, según ha detallado, Puleva produce en Alcalá de Guadaíra 150.000 de las 200.000 toneladas de leche que se fabrican en Andalucía.

"150.000 toneladas que viajan hasta Granada para ser envasadas y que vuelven a Sevilla para comercializarse, porque esta provincia es la máxima consumidora de leche Puleva", ha explicado.

Para el presidente del comité de empresa, el cierre de la fábrica sevillana solo puede ser consecuencia de una cuestión estructural para poner "dos macrocentros", uno en Lugo y otro en Lleida, cercanos a la frontera con Francia —de donde procede el grupo Lactalis— para introducir en España producto galo.

Además, ha lamentado que la empresa "se levantó de la mesa de negociación sin escuchar ni peticiones ni ofertas, como un paquete de incentivos ofrecido por la consejería".

Los sindicatos han insistido en que Lactalis quiere disfrazar el cierre de la planta y el expediente de regulación de empleo (ERE) como un traslado de personal, pero, según la secretaria general del sindicato provincial Agroalimentario de CCOO de Sevilla, "Puleva no ha hecho en firme ninguna propuesta a los trabajadores de Alcalá de Guadaíra". "Todavía no tienen preparado qué ofertarnos, sólo 70 despidos en las peores condiciones posibles porque no hay sitio para recolocar a 70 personas", ha advertido.

Vega ha enmarcado el cierre de Puleva en Sevilla en "la muerte de la agroindustria en Andalucía" y ha asegurado que la empresa "menosprecia el dinero público andaluz". Además, ha desvelado que otra empresa del sector estaba interesada en hacerse con la fábrica de Alcalá de Guadaíra, pero que "Lactalis no accedió a llevar a cabo la operación porque no están dispuestos a que se quede otra empresa que pueda hacerles la competencia".

Este viernes se celebrará una nueva reunión con la empresa, en la que "tenemos esperanzas", pero que "si no cambian su actitud haremos una llamada a la solidaridad de los andaluces y sevillanos y al consumo responsable" de los productos de la marca Puleva.

Los sindicatos también han anunciado que el plazo para la negociación finaliza el lunes 3 de marzo, fecha en la que, si el conflicto no está solucionado, se llevará a cabo un paro de 24 horas.