Los propios detenidos por la muerte el pasado lunes de María del Carmen Calderón fueron los que activaron la alarma tras pensar que en el interior del cajetín donde se encontraba pudiera haber una caja fuerte, según ha explicado el jefe de la Brigada Policial Judicial, Eliseo Gómez Palomar.

El delegado del Gobierno de La Rioja, Alberto Bretón, acompañado por miembros de la Jefatura Superior de Policía de La Rioja han explicado durante una rueda de prensa los detalles de la operación que se llevó a cabo el pasado lunes tras el asesinato de una mujer de 53 años en su domicilio situado en el 2 piso del número 67 de la calle Vara de Rey de Logroño.

A consecuencia del suceso, dos personas fueron detenidas y se encuentran ya en prisión. Bretón ha indicado que los dos detenidos son Adrián Velasco Álvarez y Francisco Javier León conocido como 'Cara Pan', ambos de Logroño y con antecedentes penales. Cabe destacar que el primero de los detenidos era vecino de la víctima.

A los dos detenidos se les imputa un delito de robo con violencia en casa habitada por el que se les puede imponer la pena de 3 a 5 años de prisión y un delito por asesinato con alevosía por lo que se les puede pedir entre 15 y 20 años de cárcel.

Durante la explicación de los detalles de la operación, Gómez Palomar ha indicado que alrededor de las 17,05 horas del pasado lunes el 091 recibió una llamada proveniente de la Central de Alarmas y alrededor de 3 minutos más tarde llegó un coche con una patrulla judicial al lugar de los hechos. Una vez allí, los agentes se dieron cuenta de que dos personas "con guantes, gorros y capuchas", se encontraban en la terraza del inmueble y, ante los hechos, subieron hasta el segundo piso.

Gómez Palomar ha indicado que los detenidos saltaron de una terraza a otra procediendo a su detención en el piso contiguo. Tras ello, los agentes se personaron en la vivienda de la víctima quien se encontraba ya fallecida en una habitación. Observaron, además, "el domicilio muy revuelto" y lo que "parece ser" el arma con el que abordaron a la víctima, una figura decorativa. Durante el registro de los detenidos, estos portaban una tarjeta de salud y un pendiente de la víctima.

Tras las investigaciones posteriores, al parecer, uno de los detenidos, aprovechando la confianza con la víctima por ser vecino, y pensando que la mujer "poseía muchas joyas" se puso de acuerdo con el segundo detenido para robar en el domicilio de la víctima. Tras llamar al timbre, entraron en la vivienda de Mª Carmen Calderón sin forzar la puerta y mataron a la víctima "sin posibilidad de defensa". Durante "45 minutos o una hora" estuvieron registrando la vivienda en busca de joyas y dinero hasta el momento que "al confundir el cajetín blanco de la alarma que se encontraba en un armario con una caja fuerte, la manipularon y saltaron las alarmas".

Además, han explicado que tras activar la alarma, ésta en primer lugar avisa al responsable pero, al no tener respuesta, llama directamente a la Policía. Posteriormente, y tras darse cuenta de que estaba la Policía en las inmediaciones, los detenidos intentaron huir hacia la terraza contigua, donde habitaba una mujer con su bebé, y allí fueron detenidos. Alberto Bretón ha querido indicar, además, "la rapidez" de los agentes en las actuación.

Gómez Palomar ha indicado, que los detenidos no ofrecieron resistencia y estaban convencidos de que la mujer asesinada "tenía bienes de valor en su domicilio".