La medida, que la Consellería de Educación ha aprobado con el apoyo de   PP, PSOE y BNG, afectará a guarderías, colegios e institutos, tanto los públicos y concertados como los privados. La mitad de las materias serán en gallego, aunque los propios centros elegirán si suben más ese porcentaje.

Diferencias por clases

La implantación de esta medida se hará según el nivel educativo. Así, en la etapa de infantil el profesor empleará la lengua materna que predomine entre sus alumnos. Si es el castellano, los docentes intentarán fomentar la adquisición progresiva de la lectura y la escritura en gallego. En educación primaria, será obligatorio el uso del idioma propio de Galicia en las clases de matemáticas, coñecemento y educación para la ciudadanía y derechos humanos.

Los estudiantes de secundaria recibirán en gallego las materias de ciencias de la naturaleza, ciencias sociales, geografía, historia, matemáticas y educación para la ciudadanía. Si ciencias se desdobla en biología y geología por un lado y física y química por otro, todas serán impartidas en gallego.

También se respetará el mínimo del 50% en bachillerato, formación profesional y la enseñanza para adultos. Además, en todos los centros se creará un equipo de normalización lingüística, formado por profesores, alumnos y personal no docente.

Este decreto, que según la Xunta y los grupos de la oposición supondrá un «avance cualitativo», completa otras medidas puestas en marcha por el Gobierno gallego, como la construcción de las galescolas.

La Xunta se queda en la mitad

El Plan de Normalización Lingüística aprobado por el Parlamento en 2004 fijaba un mínimo del 50% de las materias en gallego. A partir de ese texto, la Consellería de Educación, del PSdeG, preparó hace un par de meses un borrador del decreto de galleguización de la enseñanza en el que barajaba otro porcentaje más alto: el 56 y el 68%. El BNG, socio de gobierno de los socialistas, pedía que oscilase entre el 65 y el 70% y al PP le parecía más que suficiente el 50%.