Los Mossos d'Esquadra han detenido a cuatro personas de nacionalidad georgiana a las que se les imputa al menos ocho robos con fuerza en pisos de Barcelona.

El grupo, que ha quedado completamente desarticulado, se había especializado en esta modalidad delictiva, según informó hoy la Policía autonómica.

Operación Mar Negro

La operación, denominada 'Mar Negro', se inició en diciembre de 2006 a raíz de una sucesión de robos en viviendas que presentaban unas mismas características.

La investigación permitió relacionar los robos y apuntar hacia un grupo especializado de personas procedentes del Este de Europa.

Atrapados 'in fraganti'

Las declaraciones de diversos testimonios ayudaron a la investigación, así como el hecho de que para forzar la cerradura los autores siempre utilizaban una llave inglesa o unos alicantes tipo pico de loro.

Con la colaboración ciudadana, los Mossos pufieron detener el día 12 a uno de los miembros del grupo e identificar a otro.

Una llamada al 088 alertando de que se estaba produciendo un robo en un piso permitió a los Mossos atrapar 'in fraganti' a los dos ladrones cuando intentaban huir. Uno de ellos, no obstante, logró escapar.

Los Mossos d'Esquadra montaron un dispositivo policial gracias al cual detuvieron al ladrón que había huido cuando se dirigía hacia su domicilio.

Registro domiciliario

Los agentes registraron el piso de los detenidos, donde intervinieron numerosos objetos robados como joyas, relojes o aparatos electrónicos. Además, detuvieron a dos personas más que residían en el piso, a las que se les imputa un delito de receptación, ya que eran las encargadas de vender los objetos robados.

Los detenidos pasaron a disposición de los juzgados de guardia de Barcelona y L'Hospitalet, que decretaron el ingreso en prisión para las personas detenidas 'in fraganti' y libertad con cargos para los otros dos. Uno de ellos quedó a disposición del Cuerpo Nacional de Policía, ya que le consta una orden de expulsión pendiente de ejecución.