El sindicato CC OO-PV propone una reversión ordenada de la gestión de los centros de titularidad pública gestionados por empresas privadas en la Comunitat Valenciana, tras "la derrota" sufrida en Madrid para privatizar la gestión de seis hospitales públicos.

En esta autonomía ya son cinco los departamentos de salud gestionados mediante el llamado modelo Alzira, una fórmula de concesión administrativa iniciada precisamente con el Hospital de La Ribera en 1999, bajo el Gobierno de Eduardo Zaplana. Posteriormente, los gabinetes de Francisco Camps, también del PP, extendieron el modelo a Torrevieja, Elche y Dénia, en Alicante, y a Manises, junto a Valencia. Este modelo público-privado, cuya actuación supervisa la Conselleria de Sanidad, incluye la gestión integral del departamento de salud, es decir, no solo los hospitales, sino también del personal médico y de los centros de salud.

La Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios del sindicato ha reclamado en un comunicado que estas concesiones administrativas vuelvan a la Conselleria de Sanidad, y recuerda que recientemente se ha conseguido detener la privatización de la radiología del Consorcio Hospital Provincial de Castellón, y se ha revertido la privatización de las resonancias magnéticas del centro.

El sindicado ha manifestado que una vez más se reafirma en la defensa del modelo de gestión pública de la sanidad, y exige al Gobierno valenciano que los departamentos de salud de Llíria y Gandia se pongan en funcionamiento bajo gestión directa de Sanidad.

Respecto a la renuncia de Madrid a privatizar la gestión de la sanidad, CCOO destaca la "lucha que durante más de un año ha sostenido la llamada Marea Blanca, integrada por la ciudadanía de Madrid y por multitud de organizaciones sociales y sindicales".

El secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, también ha instado este martes al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, a "empezar de una vez por todas a revertir al sistema público lo que ha privatizado" en sanidad, y que en cualquier caso "ni se le ocurra ampliar" el proceso iniciado en la Comunitat Valenciana.

Puig ha señalado a los periodistas tras reunirse con la ejecutiva de UGT que "el freno" a la privatización de la sanidad en Madrid lleva a la conclusión de que en la Comunitat "el PP debería empezar ya" un proceso "ordenado" de reversión, sin que haga falta que esperen que los socialistas lleguen al Gobierno.

El dirigente socialista ha lamentado que la valenciana sea la comunidad española "donde hay más privatización en la sanidad", y además los "únicos datos objetivos" son los que ha dado a conocer la Sindicatura de Comptes, como por ejemplo en el caso de las resonancias magnéticas, y "se ve que es manifiestamente más ineficiente".

"Por tanto, cuesta más dinero a los valencianos tener la sanidad privatizada que si fuera pública", ha asegurado Puig, quien ha reclamado que se explique "abiertamente" en el Parlamento valenciano "cómo y de qué manera" se ha gestionado todo este proceso.

El secretario general del PSPV-PSOE ha señalado que todos los datos que se dan de la privatización sanitaria "en ningún caso están contrastados", pues por ejemplo se dice que La Ribera "funciona de forma más eficiente, pero la realidad es que jamás" se han verificado los datos, por lo que es necesaria una evaluación.

También ha explicado en la zona de La Marina que "la inmensa mayoría de la población, incluidos los Ayuntamientos del PP", exige la reversión.

"La sanidad no es un negocio", ha aseverado Puig, para quien puede haber sanidad privada y los ciudadanos tienen derecho a esa asistencia, pero "debe haber una sanidad pública, universal y de calidad", como ha "certificado" la justicia madrileña.