Un total de 1.004 rinocerontes fueron abatidos durante 2013 por los cazadores furtivos en Sudáfrica, una cifra récord que supera por primera vez en un solo año la barrera de los 1.000.

Así lo anunció este viernes en un comunicado el Ministerio de Medio Ambiente del país austral, que recordó la tendencia al alza del número de rinocerontes muertos (668 en 2012 y 448 en 2011).

Además, según la nota, 37 rinocerontes han sido abatidos en el país en lo que va de 2014.

Una vez más, el Parque Nacional Kruger fue la zona más afectada por la acción de los furtivos durante 2013.

Del total de rinocerontes muertos, más de la mitad, concretamente 606, fueron matados en el Parque Kruger, situado en el noreste del país y que cuenta con la mayor concentración de rinocerontes de Sudáfrica.

Según el Ministerio de Medio Ambiente, Sudáfrica ha visto morir desde 2008 a manos de los furtivos a 2.778 rinocerontes.

Asimismo, el número de cazadores furtivos detenidos durante el año pasado fue de 343, por los 267 arrestados en 2012.

Según las autoridades y organizaciones de protección del rinoceronte, las mafias asiáticas compran los cuernos a los furtivos para venderlos a un precio muy elevado en China, Tailandia y, sobre todo, Vietnam, donde elaboran con ellos supuestas pócimas curativas o afrodisíacos muy populares entre la población local.

Sudáfrica estima tener alrededor de 20.000 ejemplares de rinocerontes, una población que podría desaparecer en 2020 −según han alertado las reservas privadas del país− si no se recorta el volumen de caza furtiva en los próximos años.

Los esfuerzos del Gobierno por poner fin a esta lacra cuentan con el concurso de las Fuerzas Armadas e incluyen recursos como la vigilancia aérea de las reservas con aviones no tripulados, sin que de momento se haya conseguido reducir la caza furtiva.