La Junta de Portavoces del Parlamento de Navarra ha aprobado una declaración institucional por la que la Cámara insta al Gobierno foral a que "continúe con la medición entre las partes" en el conflicto del transporte urbano comarcal de Pamplona.

La declaración, presentada por Bildu, Aralar-NaBai, e Izquierda-Ezkerra, ha sido aprobada con los votos a favor de los grupos proponentes, así como del PSN. Por contra, la iniciativa ha contado con los votos en contra de UPN y PP.

La declaración señala que el Parlamento de Navarra "es conocedor de la existencia de un laudo arbitral y del esfuerzo económico que conlleva para los trabajadores, que ya han expresado su aceptación".

En un segundo punto, la Cámara insta al Gobierno foral, "responsable último del transporte público en Navarra", a que "continúe con la mediación entre las partes teniendo en cuenta que ya existe un laudo arbitral anterior".

La declaración incluía tres puntos más que no han salido adelante por la abstención de los socialistas. Entre otras cuestiones, se pedía la retirada de los expedientes de despido de TCC ha varios trabajadores, así como que la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona dedicase todos los esfuerzos para superar el conflicto.

Tras la sesión de Mesa y Junta de Portavoces del Parlamento de Navarra, el portavoz de UPN en el Parlamento de Navarra, Carlos García Adanero, ha considerado, en declaraciones a los periodistas, que no es "positivo" que la Cámara se pronuncie sobre este conflicto. "Hay que solventar cuanto antes esta situación, pero es un problema de índole laboral", ha argumentado el regionalista.

Por su parte, el socialista Juan José Lizarbe ha explicado que sus abstenciones se fundamentan en que el presidente de la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona "ya ha realizado los esfuerzos suficientes para acercar a las partes". Así, ha insistido en que "es un conflicto laboral que tienen que solucionar las partes", a las que ha llamado a "dialogar, negociar y acordar".

"reversión de la titularidad pública"

En representación de Bildu, la portavoz parlamentaria Bakartxo Ruiz ha expuesto que el conflicto en TCC es "producto de una gestión nefasta de la empresa" y que está "provocado por la aplicación de la reforma laboral". Por ello, Ruiz ha solicitado "la reversión de la titularidad pública del servicio".

En la misma línea, desde Aralar-NaBai, Patxi Zabaleta, que ha lamentado el voto negativo de UPN y PP a la declaración y la abstención del PSN en algunos puntos, ha defendido que la solución pasa por "el rescate de la concesión porque si no, no hay garantía de que, aunque se solucione el problema puntual de ahora, no se vaya a producir otro problema". "TCC debe ser rescindida en su concesión administrativa", ha precisado.

Por contra, el portavoz parlamentarios del PPN, Enrique Martín de Marcos, ha afirmado que su grupo no entiende "que se mantenga la huelga", ya que "hay un laudo arbitral" respecto al conflicto. Asimismo, ha pedido "responsabilidad a ambas partes para que lleguen a la solución del problema".

Por parte de I-E, José Miguel Nuin, ha mostrado su "total apoyo" a los trabajadores de TCC y ha defendido "la recuperación de la concesión que se hizo y la recuperación de una gestión pública" del servicio. "La gestión privada no garantiza un mejor servicio que la pública", ha insistido.

Finalmente, el representante de Geroa Bai en la Cámara navarra, Manu Ayerdi, ha opinado que "hay que poner el ojo en los ciudadanos" y ha pedido a las partes "voluntad de negociar". "Desde la empresa no vemos esa voluntad de negociar y llegar a una solución según los últimos acontecimientos", ha apuntado.