El subdirector general de Banco Sabadell y máximo responsable de SabadellGallego, Pablo Junceda, ha asegurado este miércoles que la entidad aspira a multiplicar por tres su cuota de mercado en Galicia en tres años, hasta alcanzar el 12%.

En una conferencia dada tras acudir a la reunión del patronato de la Fundación Empresa-Universidad Gallega (Feuga), en la que se ha oficializado el cambio de estatus de Banco Sabadell de miembro adherido a miembro de número, Junceda ha explicado que la entidad financiera aprobó el "plan triple" para Galicia, que fija como objetivo posicionarse como la segunda entidad en la comunidad en tres años.

Sin embargo, se ha preguntado "por qué" ser los segundos, si "el segundo es el primero de los perdedores" y ha asegurado que tienen que ser "los primeros en hacer las cosas bien". Si en el futuro la entidad considera necesario abrir más oficinas, "se abrirán más" y se harán contrataciones, ha dicho y se ha remitido al nombre del plan (triple) para calcular que, si actualmente la cuota del banco es del 4%, en tres años deberá ser el 12%.

Actualmente cuenta con una red de 150 oficinas, tras haber adquirido el Banco Gallego en la subasta del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB). En su intervención, Junceda ha señalado que es "una antigua aspiración" del grupo financiero tener "un peso en Galicia acorde a la importancia" de la comunidad en la economía estatal.

El banco, ha agregado, considera que es "el momento de apostar por Galicia" y, en ese contexto, se ha hecho con el control de Banco Gallego, que está integrado ya comercialmente y lo estará operativamente el 16 de marzo del próximo año. Se mantendrá, ha indicado, una "dirección regional" en la comunidad, en concreto, en A Coruña.

Galicia, ha destacado, "ha tenido una evolución menos negativa que el promedio de la economía española", pero su sector financiero ha estado "muy castigado por la reestructuración de las cajas" y "no ha apoyado con crédito, en la medida necesaria, la recuperación". Desde 2009, ha ilustrado, las oficinas bancarias se redujeron un 20% en la comunidad y el saldo crediticio decreció un 23%. Ambos datos están por encima del promedio español, ha apuntado.

Además, ha establecido una "relación directa" entre esta "orfandad de crédito" y el dato de que "solo el 24% de las oficinas bancarias gallegas son de bancos sanos" —de los clasificados en el grupo 0, que no han necesitado inyecciones de fondos públicos—. El resto son de bancos "sometidos a planes de reestructuración" con ayudas públicas que implican "compromisos limitativos de su actividad crediticia".

Así, ha rechazado que las entidades no estén dando crédito y ha reivindicado que antes de la integración con Banco Gallego las 28 oficinas del Sabadell en la comunidad tenían el 25% de la cuota de mercado de líneas ICO. "Los que dicen que no hay crédito no deberían interrumpir a los que los estamos dando", ha dicho, "enmendando" a Edison.

Dejar atrás la recesión

Junceda ha trasladado también que su visión sobre el futuro de la economía es "positiva". "Pienso que estamos en un punto de inflexión que deja atrás la recesión y nos sitúa en el principio del final de la crisis", ha afirmado. La recesión, que ha provocado una pérdida del 7,5% del PIB, ha sido "mala hasta lo superlativo", pero ha llamado a extraer lecciones de lo ocurrido y a darse cuenta de que "un mundo nuevo ha sustituido a los modelos anteriores".

El esquema clásico de salida de la crisis (devaluación del tipo de cambio, seguida de un tirón exportador, una activación de la inversión, del empleo y finalmente del consumo) "ya no es el mismo" y la mejora de la competitividad lograda se debe a "una devaluación interna" tanto de precios como de salarios.

Precisamente, ha agregado el responsable de SabadellGallego, el marco de relaciones laborales más flexibles es una "herencia positiva" de la crisis, al igual que un tejido empresarial más exportador y una administración pública "más controlada en lo financiero", pero que ha dotado al país de un nivel de infraestructuras "puntero" y que está "mejor preparada" para garantizar la sostenibilidad de los servicios públicos.

No obstante, existen "muchos riesgos", entre los que ha identificado el coste de la energía para uso industrial, que resta competitividad, la necesidad de una fiscalidad más eficiente (que recaude más "pero porque recauda mejor", no por una subida de impuestos) y la universidad, que requiere de inversión y de "una mayor aportación privada a su financiación". "Ahí estará SabadellGallego", ha asegurado.

Sistema financiero

Junceda ha repasado también lo acontecido en el sistema financiero, el que ha tenido "una transformación más radical", junto con el inmobiliario. Este último "ha sido casi absolutamente depredado has su práctico exterminio". El sector financiero había trasladado a su balance "el grueso de las viviendas y su financiación", ha dicho, aunque ha afirmado que "esta ha sido, no la crisis de la banca, sino la crisis de las cajas de ahorro".

Hasta ahora, ha proseguido, las 45 cajas que iniciaron la crisis en 2008 se han quedado reducidas a 11 "y el proceso de reestructuración continúa abierto". El sistema ha reducido en cuatro años su capacidad instalada en un 21%, si se mide en número de oficinas, y en un 15% por empleados. "Todavía puede quedar un recorrido en este ajuste hasta alcanzar un 35% de cierres de oficinas para acabar en ratios por habitante en el promedio europeo", ha advertido.

Además, ha defendido la unión bancaria en Europa, puesto que considera que será la "espada Excalibur" capaz de cortar "el nudo de acero" que vincula el riesgo soberano y el de los bancos de un estado. "Esta espada imaginaria capaz de cortar ese nuevo que nos atenaza no está en manos de un rey, sino de una reina, y no precisamente bretona, sino alemana", ha dicho, en alusión a la canciller Angela Merkel.

Esta unión bancaria, ha añadido, "limitará la necesidad de dinero público" en caso de insolvencia de una entidad y mejorará la estabilidad y capacidad de respuesta a las crisis sistémicas.