La Confederación Empresarial de la Provincia de Huesca (CEOS-CEPYME) ha expresado su preocupación por la nueva regulación del servicio de interrumpibilidad en el sistema eléctrico y ha manifestado su inquietud a la CEOE para que la organización inicie contactos "al más alto nivel", de modo que la nueva normativa "afecte a nuestras empresas en la menor medida de lo posible".

El presidente de CEOS-CEPYME Huesca, Fernando Callizo, y el director general, Salvador Cored, han participado esta semana en la Junta Directiva de la CEOE y, tras conversaciones mantenidas con empresarios, han remitido un escrito explicando "la preocupación existente ante las informaciones recabadas sobre la nueva normativa, ya que apuntan a la viabilidad de algunas de las empresas, en tanto en cuanto la aplicación de la Orden puede afectar gravemente a la competitividad o a la posible paralización de planes inversores de las empresas altoaragonesas a las que afecta esta regulación por el incremento de costes energéticos".

La publicación de la Orden IET/2013/2013 en el Boletín Oficial del Estado, en la que se modifica la regulación de la asignación del servicio de gestión de la demanda de la interrumpibilidad, ha provocado "una grave inquietud sobre la continuidad y el futuro de varias industrias en distintas comunidades autónomas".

Debido al efecto inmediato de inviabilidad que genera en las empresas modulables, se ha solicitado desde empresas y asociaciones que se intervenga ante la Secretaría de Estado de Energía y se plantee una corrección de errores, de manera que se modifique la consideración de potencia interrumpible.

En este sentido, se solicita que la Potencia Media anual será considerada como la Potencia Interrumpible, frente a la Potencia Media en Periodo 6 o la Potencia Media en Periodo 1, tal y como se planteó en las negociaciones por el Secretario de Estado.

El sistema de interrumpibilidad se viene aplicando desde los años 80, tiene como objeto participar en la gestión de la demanda de energía eléctrica y se aplica desde entonces a las empresas con gran consumo de energía, entendiéndose como tales aquellas en las que el coste eléctrico representa una parte muy importante del coste final del producto.

Colaboran en la gestión de la demanda

Estas empresas colaboran con el sistema eléctrico en la gestión de la demanda de doble manera. Principalmente funcionando con una curva de carga modulada, con bajos consumos en los periodos de mayor demanda y, por lo tanto, favoreciendo el equilibrio del sistema.

Por otro lado, reduciendo su consumo a la potencia residual cuando así es requerido por el operador del sistema. Por ello, la interrumpibilidad "siempre se ha calificado como el seguro del sistema eléctrico, además de considerarse imprescindible para mantener la competitividad de estas empresas".

Las empresas industriales consideradas como grandes consumidores han realizado "enormes esfuerzos tecnológicos, de inversión y de cambios de procesos operativos para cumplir los requisitos necesarios y contribuir a la gestión de la demanda del sistema eléctrico, con programas de operación flexibles y muy modulables".

"No hay que olvidar que la modulación es la auténtica gestión de la demanda, pues contribuye a aplanar la curva de carga y evita que los precios del mercado de energía aumenten", ha señalado CEOS-CEPYME en una nota de prensa.

Por ello, están solicitando "apoyos de todos los sectores afectados para que se tenga en consideración toda esta problemática y, en concreto, para que a través de la Secretaría de Estado de Energía se realicen las correcciones necesarias en la Orden Ministerial y se defina, al menos y como mal menor, la Potencia Media Anual como Potencia Interrumpible".

"Sin estos matices, la aplicación de la Orden abocará a muchas industrias a una situación de absoluta falta de viabilidad, con graves consecuencias sobre el empleo en las comunidades autónomas en las que están implantadas".