El método riguroso y libre del ceramista valenciano Enric Mestre y la huella que ha dejado en la producción de los alumnos que ha tenido a lo largo de 31 años de docencia protagonizan la nueva exposición del Museo Nacional de Cerámica y Artes Suntuarias Gonzaléz Martí de Valencia, que reivindica el trabajo de este artista y del género con una selección de más de medio centenar de obras.

La muestra, que se podrá visitar hasta el 9 de febrero, es la primera entrega del proyecto expositivo 'Maestros de la cerámica y sus escuelas', que mediante ocho exposiciones pretende abarcar la obra de grandes creadores de la cerámica y su ámbito artístico de influencia, entre los que figuran, además de Enric Mestre, Arcadio Blasco, María Bofill, Claudi Casanovas, Madola, Elena Colmeiro o Ángel Garraza.

La exposición —organizada por el Taller-Escuela Cerámica de Muel, dependiente de la Diputación de Zaragoza la Subdirección General de Promoción de las Bellas Artes del Ministerio de Cultura y el González Martí— ha sido presentada en rueda de prensa por el propio artista, que ha estado acompañado por la subdirectora general de Promoción de las Bellas Artes, Begoña Torres, el director del museo, Jaume Coll, y el comisario, Alberto Andrés.

Este recorrido presenta conjuntamente la obra de Enric Mestre y la de 18 de sus alumnos de distintas generaciones, procedencias geográficas y culturales que reconocen su influencia. En total, se exhiben 53 obras, 12 de Mestre y 41 de los artistas ceramistas Ana Felipe, Anna Pastor, Antonia Carbonell, Bibiana Martínez, Carmen Ballester, Carmen Marcos, Carmen Sánchez, Concha Regne, Fanny Galera, Hisae Yanase, Juan Luis Tortosa, Juan Orti, Myriam Jiménez, Pablo Ruiz, Su-pi Hsu, Teresa Aparicio, Xavier Monsalvatje y Xohan Viqueira.

A través de todas ellas se pueden analizar las claves y referencias comunes, que en ocasiones les llevan a disciplinas complementarias como pueden ser la pintura, el dibujo, el grabado o la infografía. Algunos de estos trabajos se muestran a través de cuadernos de artista, bocetos o maquetas.

Mestre ha subrayado que siempre ha dejado "absoluta libertad" a sus discípulos para que encontraran "su propio camino artístico". Eso sí, ha admitido, ha intentado inculcarles la necesidad de "un trabajo bien hecho" y "con ideas que interesen al público".

"el panorama está mal en todo"

Interrogado por su opinión sobre la situación actual de la cerámica, Mestre ha comentado que "el panorama está mal en todo" y ha lamentado que en esta disciplina, a pesar de haber experimentado toda "una revolución no ha trascendido al gran público".

"No hemos sabido conectar ni siquiera con los críticos o las galerías", ha dicho Mestre, que ha agregado: "Los escultores están trabajando ahora con cosas como madera o papel maché y nosotros y son considerados artistas, sin embargo nosotros, que utilizamos un material con miles de años, somos una especie de lazarillos de la artesanía", ha comentado.

Aun así, esta exposición refleja el interés de nuevos artistas por hallar vías renovadas para canalizar la expresividad de la cerámica, desde "los dorados a la excelencia del torno, pasando por obras que utilizan el cascarón de la fundición del bronce como material artístico", ha detallado el comisario.

Por su parte, Begoña Torres ha reconocido la dificultad en la actual coyuntura de crisis de promocionar y hacer exposiciones y ha comentado que desde su subdirección en el Ministerio se está intentando introducir el arte contemporáneo en museos históricos. "El propio Prado va a empezar a hacer exposiciones de este tipo mezcladas" con su programación, ha aseverado.

La representante del Ministerio ha puntualizado que en el caso del González Martí "no ha hecho falta porque este maravilloso centro ya tiene una larga tradición" en al organización de muestras de esa clase.

RENOVACIÓN

Enric Mestre, artista, ceramista pionero en la renovación de la escultura cerámica en la Península nació en el pueblo valenciano de Alboraia (Valencia) en 1936. Estudió pintura en la Facultad de Bellas Artes de San Carlos de Valencia (1953-1958), desarrollando sus primeros pasos en el mundo de la publicidad, disciplina que abandonaría a mediados de los sesenta, para dedicarse plenamente a la cerámica y a su enseñanza.

Mestre fue alumno de Alfonso Blat, del que aprendería el virtuosismo del esmalte, y cuyo influjo le ha llevado a un constante y riguroso campo de investigación técnica a lo largo de toda su trayectoria.