El Comité Español de Unicef presentó el lunes el informe de acción humanitaria de la organización para 2007, en el que se calcula que este año serán necesarios algo menos de 500 millones de euros para atender las emergencias humanitarias de 33 países de todo el mundo.

Casi una quinta parte de esa ayuda, hasta 121 millones, irá a parar a Sudán y sobre todo a la zona de Darfur, donde el conflicto armado iniciado en 2003 ha acabado con la vida de 4 millones de personas, entre ellos 1,8 millones de niños.

Otra de las prioridades de la organización son los países del llamado cuerno de Africa, asolados por las sequías y por el reciente conflicto armado de Somalia, la Europa Central y del Este, el sur de Asia, Oriente Medio y la zona del Pacífico arrasada por el tsunami de 2004.

La acción de Unicef tiene otro polo de atracción en aquellos países con conflictos menos conocidos, las llamadas emergencias 'silenciosas' por la escasa cobertura mediática que reciben y porque suelen quedar ocultas tras acontecimientos más inmediatos.

Se incluyen en este grupo países como Haití, que tiene la tasa de mortalidad infantil más alta de toda América Latina, Eritrea, un país en conflicto y amenazado por sequías cíclicas o la República Centroafricana, en situación muy inestable por diversos conflictos civiles.

Unicef calcula que de los 653 millones de dólares que necesitaría para cubrir todas esas situaciones de emergencias la organización recibirá algo más de la mitad, el mismo porcentaje que el año anterior, cuando se presupuestaron 1.200 millones de dólares.

La organización ha agrupado este año diversas campañas para mejorar la eficacia y optimizar recursos, lo que explica que las previsiones de este año se hayan reducido a la mitad.

Para la presidenta del Comité Español de Unicef, Consuelo Crespo, ese dinero es "absolutamente necesario" para cubrir las necesidades más inmediatas y es "muy poco dinero comparado con lo que se invierte en otros objetivos".

Crespo destacó la situación "especialmente grave" de la zona de Darfur, donde Unicef ha conseguido resultados positivos, con 1,3 millones de niños vacunados y tasas de nutrición y escolarización similares a las registradas antes de la emergencia humanitaria de 2004.

España aumenta su aportación

La presidenta del Comité Español informó de que que el Gobierno español ha aumentado "considerablemente" su aportación respecto a 2006 y que en concreto ha destinado 8,4 millones de euros a diversas emergencias humanitarias.

Crespo recordó que 170.000 españoles realizan aportaciones periódicas a Unicef y agradeció la colaboración de los que además "son generosos" en casos de emergencias como el tsunami, pero "necesitamos que esas aportaciones estables crezcan porque son necesarias".