La Asamblea General de la ONU volvió a manifestarse este martes de forma abrumadora en contra del embargo estadounidense a Cuba, al votar una resolución de condena y a favor de su levantamiento por 188 votos a favor, dos en contra —de EE UU e Israel— y tres abstenciones.

El apoyo a esta resolución presentada por Cuba constituye ya la vigésimo segunda ocasión consecutiva en que la Asamblea General se expresa en contra del bloqueo económico impuesto por EE UU sobre la isla hace medio siglo.

La resolución, titulada 'Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba', recibió los mismos apoyos que en 2012, un voto en contra menos y una abstención más.

La votación tuvo lugar después de un debate en el que todos los intervinientes, salvo el representante de Estados Unidos, se mostraron en contra de las medidas de Washington y pidieron su levantamiento.

Organismos latinoamericanos como Mercosur, CELAC o Caricom, así como de fuera de América, como la Organización de la Conferencia Islámica o el Movimiento de Países No Alineados, se manifestaron de forma unánime en contra del embargo.

Pese a que inicialmente se especuló con que la llegada de Barack Obama a la Casa Blanca supondría el fin del embargo, la medida sigue en vigor y, según el ministro de Exteriores cubano, Bruno Rodríguez, incluso se ha "recrudecido", especialmente en el sector financiero.

Rodríguez ha tomado la palabra este martes ante la Asamblea General para reclamar en nombre de su Gobierno, por vigésimo segunda vez consecutiva, el fin del bloqueo. Como viene sucediendo desde 1992, la votación se ha saldado con un amplio respaldo para Cuba, en esta ocasión 188 apoyos para la isla y sólo dos 'no', los de Estados Unidos e Israel.

El canciller ha destacado los efectos que el bloqueo tiene para el sector financiero y ha explicado que, desde enero de 2009 hasta septiembre de 2013, más de 30 empresas han sido multadas con un total de 2.446 millones de dólares (unos 1.800 millones de euros) por sus vínculos con la isla y con otros países aliados, según Prensa Latina.

En su vigilancia, Estados Unidos emplearía el "enorme poderío tecnológico de su sistema masivo de espionaje", según Rodríguez, que ha recordado que este mismo sistema es el "recientemente denunciado" por otros países en el caso de la supuesta vigilancia a dirigentes internacionales.

El canciller cubano también ha querido hacer ver que el bloqueo de Estados Unidos tiene repercusión para el ciudadano de a pie y, entre otras cuestiones, ha expuesto parte de los efectos que conlleva en el sector sanitario.

Rodríguez ha desmentido que el Gobierno norteamericano sea, como dice, "un donante de ayuda humanitaria" a Cuba y, en cambio, le ha acusado de cometer genocidio. En este sentido, ha apuntado que el bloqueo podría ser definido como genocidio de acuerdo a la Convención de Ginebra.