La delegada provincial de Educación, Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía en Málaga, Patricia Alba, ha subrayado que las directrices establecidas para que se respete la identidad de género del menor transexual del colegio San Patricio de la capital "no entran en confrontación con los derechos de los demás alumnos".

Por ello, ha mantenido que su aplicación no tiene que ser consultada a los padres de los otros estudiantes y ha reiterado que su departamento sigue estudiando la posibilidad de abrir un expediente administrativo al centro por no cumplir esos requerimientos.

Alba se ha pronunciado así después de que un grupo de padres del colegio San Patricio, perteneciente a la Fundación Diocesana Santa María de la Victoria, que depende del Obispado, mostrara su descontento por el hecho de que la Administración regional no hubiera contado con su opinión para tomar una decisión en torno al menor transexual, al tiempo que demandaban la paralización de los requerimientos establecidos.

La delegada se ha mostrado dispuesta, tal y como le han solicitado, a reunirse con este grupo de padres del colegio en el que cursa sus estudios el menor de seis años transexual, cuyos familiares han pedido que se le permita acudir con falda.

No obstante, ha insistido en que "no se les ha consultado porque el derecho de esta niña no entra en confrontación con los derechos de los demás alumnos", por lo que, "obviamente, no hay nada que consultar".

"Se les atenderá al igual que atendemos al resto de ciudadanos que piden una reunión, teniendo en cuenta el volumen de trabajo y las citas solicitadas", ha manifestado.

Asimismo, ha afirmado que la Junta "tiene que garantizar que los menores no sufran discriminación en los centros educativos y eso es lo que estamos garantizando con estas medidas planteadas al colegio San Patricio". Son directrices para que se respete la identidad de género del menor transexual, que se siente niña, y que, por tanto, "se han de cumplir, no entrando en absoluto en confrontación con los derechos del resto de los menores", ha aseverado.

Alba ha lamentado, sin embargo, que "el centro siga sin cumplirlas", por lo que ha recordado que, además de haber trasladado el caso a la Fiscalía de Violencia a la Mujer y contra la Discriminación por Identidad Sexual, Educación está estudiando la posibilidad de abrir un expediente administrativo al colegio por no cumplir esos requerimientos, que, sin embargo, sí han sido aplicados por otros centros con casos similares.

En el escrito que presentaron estos padres, estos pedían que no se utilizara al menor transexual ni al resto de los alumnos del centro como "conejillos de indias para experimentos de integración"; en su opinión, "no suficientemente avalados por informes médicos, psicológicos y judiciales".

Del mismo modo, apuntaban que se reservaban "el derecho a emprender acciones legales contra los responsables de la Administración en caso de que la obligatoriedad de esta medida provoque cualquier tipo de problema en el desarrollo de los alumnos o en la normal convivencia del centro, en defensa de los derechos legítimos de nuestros hijos".