Además, según los datos facilitados a Europa Press por la Hispalense, en cuatro áreas de investigación —Ingeniería Civil, Ingeniería Eléctrica, Ciencias Agrícolas y Matemáticas— la US está entre las 200 mejores del mundo, con mención especial al ámbito de las Matemáticas, donde la posición es la número 83.

Según estos resultados, la posición nacional mejora dos puestos respecto al año 2012, donde la Universidad de Sevilla ocupaba la decimotercera posición, frente a la undécima de 2013.

En la última sesión del Claustro, la vicerrectora de Internacionalización, Carmen Barroso, informó del trabajo que la Hispalense está realizando para mejorar su posición en los ránkings universitarios, que han crecido notablemente en impacto y popularidad mediática en los últimos tiempos.

Entre estas clasificaciones se identifican las denominadas globales, que pretenden ofrecer un valor simple de posicionamiento de la universidad y están muy ligadas al ámbito de la investigación, de aquellas otras que se denominan multidimensionales, en las que no se ofrece una posición global, sino diferentes ubicaciones en función de los criterios seleccionados.

Con respecto al ránking de Shangai, uno de los más importantes, a partir de 2012, y sobre todo en el 2013, se ha iniciado una senda de mejora que sitúa a la sede académica muy cerca del umbral de corte establecido —las 500 mejores universidades—. En valores concretos, se ha conseguido en el 2013 mejorar dos puestos a nivel nacional frente a los datos del 2011. Prueba de ello es el crecimiento en cuanto al número de publicaciones con impacto internacional, así como la consideración en el ámbito de las matemáticas y de las ingenierías, entre los campos más reputados del mundo.

Desde el Vicerrectorado de Internacionalización se ha puesto en marcha un conjunto de acciones entre las que destacan la realización de un estudio bibliométrico de la US, que permita conocer la situación de partida en cuanto a la internacionalización de la investigación; un análisis pormenorizado del campo de las ciencias sociales; la potenciación de redes internacionales con la intención de incrementar las colaboraciones científicas; la elaboración, junto al Vicerrectorado de Investigación, del código de Buenas Prácticas para la Firma de la Publicaciones Científicas; el impulso de acciones específicas para la captación de alumnos internacionales; y, por último, la colaboración en el V Plan Propio de Investigación y el II Plan Propio de Docencia para incrementar el grado de internacionalización de la universidad.