La Junta de Gobierno de la Diputación de Guadalajara ha dado luz verde a las bases que regularán la concesión de ayudas de la institución a los ganaderos de la zona Noroeste de la provincia para que puedan compatibilizar su actividad con la existencia de poblaciones de lobos, compensado las pérdidas de ganado que sufren como consecuencia del ataque de lobos.

Se trata de ayudas a los ganaderos por el lucro cesante que padecen a consecuencia de los ataques de lobos a su ganado. La Diputación de Guadalajara, que dispone de una partida de 16.000 euros para esta iniciativa, trata así de contribuir al mantenimiento del empleo y la población en el medio rural y hacer compatible la actividad ganadera con la existencia de poblaciones de lobo ibérico -unos 15 ejemplares en la zona—, una especie protegida en peligro de extinción.

Según los últimos datos, fechados a mediados de septiembre, hasta el momento se han contabilizado 16 ataques al ganado en los términos municipales de Atienza, Galve de Sorbe, La Bodera, Cantalojas y otros, con un total de 29 ovejas muertas y 13 heridas, así como 11 terneros y dos vacas muertas y varias heridas de diversa consideración, según ha informado la Diputación en un comunicado.

Los hechos producen intranquilidad entre los ganaderos de la zona, así como cuantiosas pérdidas para las maltrechas economías del sector. Con esta situación, los responsables de la Diputación entienden que un posible abandono de la actividad ganadera supondría un importante perjuicio socioeconómico que agravaría la despoblación.

Las ayudas de la Diputación de Guadalajara están dirigidas a titulares de explotaciones ganaderas de bovino, ovino y caprino ubicadas en el noroeste de la provincia de Guadalajara. Para recibir la ayuda deberán haber comunicado el ataque y el detalle de los daños causados a la Consejería de Agricultura, además de cumplir otros requisitos establecidos en las bases aprobadas por la Junta de Gobierno de la Institución provincial.

Primera vez que hay ayudas

Es la primera vez que la Diputación establece una línea de ayudas para los ganaderos que sufran pérdidas por ataques de lobos. La presidenta de la Institución, Ana Guarinos, insiste en que "tenemos que apoyar a los ganaderos que realizan una actividad tan necesaria en nuestra provincia y tan sacrificada, que requiere un gran esfuerzo diario. Por eso la Administración tiene que ser sensible a esta situación y ayudar en la solución de un problema importante en la provincia", haciendo compatible esta actividad con la protección del medio ambiente y la biodiversidad.

La Asociación Provincial de Agricultores y Ganaderos (APAG) es la encargada de llevar el control de los daños que causan estos ataques en la ganadería de la provincia.

La Diputación ha participado en varias reuniones organizadas por la Consejería de Agricultura en colaboración con APAG, para informar a los ganaderos de las ayudas posibles, así como del pago de ayudas que se les adeudaban desde el año 2010. En dichas reuniones han participado la consejera de agricultura, María Luisa Soriano y los directores generales de Montes y Espacios Naturales, Javier Gómez-Elvira, y de Agricultura y Ganadería, Tirso Yuste.