El presidente del comité de empresa de Tata Hispana, José Luis Chueca, ha confiado en que el posible inversor, la empresa catalana Benseny, "se comprometa más de lo que he hecho hasta ahora al decir que se queda con 50 empleos".

Esta oferta la ha realizado Benseny después de que la dirección de Tata Hispana anunciara este martes el cierre de la planta de Zaragoza que emplea a unas 300 personas.

Chueca ha señalado que esta oferta de Benseny se formalizaría una vez que "la empresa esté liquidada" para precisar que "eso no es un compromiso de mantener el negocio, sino una oportunidad de una situación en la que nos hemos visto abocados".

Los trabajadores de Tata Hispana, filial de Tata Motors, se han concentrado esta tarde en la plaza de España de Zaragoza para protestar por la decisión de cerrar la planta.

En declaraciones a los medios de comunicación, Chueca ha justificado esta concentración al señalar que "la empresa nos ha generado un daño con casi 300 familias en el paro y queremos que nos pague el daño que nos ha hecho".

Ante la reunión que mantendrán el próximo martes, 1 de octubre, entre la dirección de Tata Hispana, Benseny, el Gobierno de Aragón y el comité de empresa, Chueca se ha mostrado expectante ante la ofertas que trasladen en esa cita para "ver qué propone cada una de las partes para empezar a dar una solución".

"Esperamos conocer qué oferta propone Benseny y saber hasta dónde se implica Tata Motors en dar una solución y el Gobierno de Aragón no puede dejar caer a esta empresa, de más de 50 años, simplemente con decir que la situación va a ser muy difícil o muy complicada".

Sobre la posible creación de una cooperativa de trabajadores que se hiciera cargo de la empresa, José Luis Chueca ha puntualizado que "no es el objetivo prioritario, sino las indemnizaciones y luego intentar formarla para que este negocio continúe con empleo de calidad y con personas que se comprometan en sacar esto adelante".

Las próximas acciones que tienen programadas pasan por una manifestación el próximo jueves, 3 de octubre, que partirá desde el edificio Pignatelli, sede del Gobierno de Aragón, para llegar a las Cortes de Aragón, ya que ese día se debatirá una iniciativa sobre este problema de Tata Hispano.

"todo está relacionado"

Trabajadores de la concesionaria del autobús urbano de la ciudad también se han sumado a esta movilización y el presidente del comité de empresa de AUZ, Javier Anadón, ha indicado que "estamos aquí porque todo está relacionado".

En declaraciones a Europa Press, Anadón ha explicado que los trabajadores de Tata Hispana "si han cerrado es por la baja de volumen importante de trabajo en el que influyen los recortes del transporte".

Anadón ha relatado que "Tata tenía que haber carrozado autobuses para el servicio municipal de transportes, que no ha hecho debido a los recortes" y además ha criticado que en el nuevo pliego de la contrata se ha prolongado la vida de servicio de los vehículos. "Antes se retiraban del servicio a los 14 años y ahora se prolonga dos años más y todo ese volumen de trabajo Tata se ha quedado sin él".

Sobre el conflicto entre empresa y trabajadores, Anadón ha reiterado que "no vamos a aceptar otro acuerdo que el alcanzado con el Ayuntamiento" por el que los trabajadores se congelan el sueldo y se aumenta en 500.000 kilómetros el recorrido anual.

Así, ha avanzado que el día 1 de octubre, en la Comisión Nacional de Convenios Colectivos, entregarán el documento que Ayuntamiento y comité de empresa firmaron para "que se le diga a la dirección de la empresa que lo firme y así finalizaría el conflicto".