El PSOE ha coincidido con los sindicatos Comisiones Obreras y UGT en exigir al Gobierno de Castilla-La Mancha un plan regional por el empleo que esté dotado, como mínimo, de 50 millones de euros, y ha insistido en que Castilla-La Mancha cuenta con 200 millones de euros "con los que no contaba" por la ampliación del margen de déficit.

"Nosotros siempre hemos hablado de 50 millones de euros", ha apuntado la portavoz de Empleo del Grupo Socialista, Milagros Tolón, quien ha destacado que la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, "se ríe de todas las familias que tienen todos su miembros en paro y se ríe de las más de 130.000 personas que no cobran prestaciones por desempleo ni subsidios en la región".

Esta es la conclusión que saca el PSOE al ir conociendo datos del programa 'Empresa-Empleo', dotado con un presupuesto de 4,5 millones de euros, que anunció Cospedal durante el pasado Debate sobre el Estado de la Región.

Así, ha lamentado que este programa sólo vaya a beneficiar a 1.500 desempleados, que vaya a subvencionar el empleo "precario" y, además, ha advertido, "con un contrato de cuatro meses", las personas contratadas no van a poder cobrar luego prestación por desempleo al no cubrir los seis meses que son necesarios para ello.

Las ocurrencias de cospedal

Es por ello que la portavoz socialista ha tachado este programa de "ocurrencia" de Cospedal que, a su juicio, "no lleva a ningún sitio y no va a ser efectivo para paliar el desempleo en Castilla-La Mancha". "Este programa es insuficiente en la cuantía al estar dotado de 4,5 millones, sabiendo que el Gobierno tiene 200 millones de euros de margen para podérselo gastar en atajar el paro", ha recalcado.

Además, ha manifestado que este programa no va a ayudar a las familias que tienen todos sus miembros en paro, ni a los parados sin cobertura, ni a los parados de larga duración, ni a los parados mayores de 45 años, ni a los parados de baja o ninguna cualificación porque "no son su prioridad" en este programa, ha avisado.

Finalmente, ha llegado a la conclusión de que con casi 300.000 parados en la región "hoy es más necesario que nunca un plan regional por el empleo", cuya prioridad sea las 90.000 familias que tienen todos sus miembros en paro y las personas que no cobran prestaciones por desempleo ni subsidios en la región. Un plan, ha dicho, que suponga la contratación de 30.000 personas, "porque dinero hay", durante seis meses con la posibilidad de que luego cobren prestación.