El ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha respondido al primer ministro británico, David Cameron, que su actitud "reiterada este martes" con motivo del día nacional de Gibraltar "contraviene claramente las resoluciones" de la ONU.

El jefe de la diplomacia española ha asegurado también que el Gobierno quiere retomar las conversaciones sobre la soberanía de Gibraltar para cumplir esas resoluciones de la ONU, aunque ha subrayado que se hará cuando se considere "oportuno" y previo acuerdo siempre del Parlamento español.

García-Margallo ha hablado este martes de Gibraltar tanto en la inauguración de un Foro Internacional —organizado por Nueva Economía Fórum— como después en el pleno del Senado, al responder a una pregunta de un senador del PP sobre este asunto.

Estas palabras del ministro han coincidido con la celebración del día nacional de Gibraltar, motivo por el cual Cameron ha expresado, en un mensaje de vídeo, su solidaridad con los gibraltareños y ha destacado la "enorme dignidad" de la población del Peñón a raíz de las recientes tensiones con España.

Según el primer ministro británico, no hay posibilidades de hablar sobre la soberanía de Gibraltar sin el consentimiento de su población. "La actitud del Reino Unido, reiterada este martes por Cameron, contraviene claramente las resoluciones de la ONU", ha señalado García-Margallo.

La posición de España es que las negociaciones en materia de soberanía corresponden sólo a los gobiernos español y británico, como ha recomendado Naciones Unidas ininterrumpidamente desde 1965. Se trata, ha explicado, de varias resoluciones emitidas por la ONU en los años 60 que respaldaban la posición española en este contencioso que ya dura 300 años.

"España sí se considera obligada por esas resoluciones, como por toda la legalidad internacional", ha matizado.

El ministro ha aprovechado su intervención en el Senado para explicar los principios en los que el Gobierno quiere basar su política sobre Gibraltar.

El cumplimiento de una proposición no de ley que el PSOE presentó en 1985 (basada en que el contencioso de Gibraltar debe resolverse en el estricto respeto de la integridad territorial mediante la recuperación del ejercicio de la soberanía) y el respeto a esas resoluciones de la ONU son dos de esos principios.

A estos ejes el ministro suma mantener unas "relaciones privilegiadas" con el Reino Unido, socio en la OTAN y en la UE, y la condena al Foro Tripartito puesto en marcha por el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero en 2004 que "colocó en situación de igualdad" a Gibraltar con el Reino Unido y España.

"Ese Foro equivale a como si en un litigio sobre propiedad se diese al inquilino voz, voto y veto", ha precisado. La constitución de grupos ad hoc para abordar las distintas materias que intervienen en el litigio es otro de los ejes del ministro, que ha añadido que en pesca y medio ambiente deberían participar además Gibraltar y Andalucía.

Sobre la Junta, García-Margallo ha lamentado que hasta el momento haya "guardado un clamoroso silencio" en este asunto. El ministro ha dicho que el respeto a la legalidad europea en la represión del contrabando y de los tráficos ilícitos es otro de los objetivos del Ejecutivo.

Respecto a la soberanía, ha asegurado, ésta se abordará cuando se considere "oportuno" pero siempre previo acuerdo del Parlamento y en la ONU o en los órganos jurisdiccionales competentes, ya sea el Tribunal de la Haya o el del Mar o uno ad hoc para ello.

El ministro ha finalizado su intervención con dos citas. La primera del historiador Claudio Sánchez Albornoz: "No puede haber ningún español digno de tal nombre capaz de escribir sin sonrojarse que Gibraltar no es España".

Y una segunda del expresidente del Gobierno Felipe González: "El problema de Gibraltar tiene una solución lógica: la devolución a España de un trozo de territorio español". "Espero que los correligionarios de Felipe González acompañen al Gobierno en esta senda", ha agregado.

También el ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, ha hablado este martes con motivo del día nacional afirmado que mantendrán "la calma" y seguirán "adelante" porque el Peñón "siempre será británico".