Las personas que colaboren con la Universidad de Málaga (UMA) en el programa de mecenazgo para la formación universitaria, destinado a los estudiantes que se matriculen por primera vez en estudios oficiales de grado y dispongan de escasos recursos, tendrán un reconocimiento fiscal, pero también social, con el acceso a los servicios que ofrece la institución, como biblioteca o polideportivo.

Así lo ha explicado este viernes la rectora de la UMA, Adelaida de la Calle, quien ha manifestado que esta iniciativa "se enmarca dentro de las colaboraciones que tienen que ser comunicadas al Consejo Social", por lo que ha apuntado que será presentada para su aprobación en la próxima reunión de dicho organismo, aunque ha precisado que "el mecanismo está abierto para que se pueda actuar".

Este programa de 'Mecenazgo para la formación universitaria", que ya aparece en la página web de la Universidad, recoge las bases de la iniciativa y señala quiénes serán los destinatarios, "estudiantes que se matriculen por primera vez, que acrediten una nota de acceso entre el cinco y el 5,49 y que cumplan los requisitos de renta establecidos", ha dicho De la Calle.

La rectora ha apuntado que ya se ha abierto la cuenta en el Banco Santander, que lleva la denominación de mecenazgo para la formación universitaria, y ha manifestado que en el programa elaborado se señalan las distintas modalidades de ingreso y también la fórmula habilitada por la UMA para acreditar esos pagos ante Hacienda, ya que se expedirá una certificación.

Ha hecho hincapié en que quieren ser "generosos con los que son generosos con nosotros", por lo que los mecenas tendrán beneficios fiscales, como la reducción del 25 por ciento en la cuota del IRPF cuando sean personas físicas, y el 35 por ciento en impuestos de sociedades. En cuanto al reconocimiento social, aparte del acceso a los servicios, recibirán una acreditación como colaborador o mecenas.

La también presidenta de la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas (CRUE) ha indicado que se realizará una convocatoria con carácter anual, que se abrirá en octubre, cuando finaliza el proceso de matriculación, y se resolverá a primeros de diciembre, señalando que la bolsa que se crea "estará siempre abierta".

No es caridad

La rectora ha incidido en que no se trata de caridad, "es resolver una situación de emergencia, porque yo creo que en una universidad pública es el Estado el que se tiene que hacer responsable de estas situaciones, pero como estamos viendo que hay exclusión de estudiantes que no van a poder llegar, lo que pretendemos es que haya igualdad de oportunidades para todo el mundo".

Ha recordado que "da la casualidad de que hasta el día de hoy, el cinco es aprobado, no el 4,5, pero tampoco el 5,5", y ha apuntado que los universitarios malagueños "proceden de entornos muy diferentes y han tenido oportunidades distintas". Ha reiterado que esta situación de emergencia "la hemos resuelto las universidades", indicando que hay muchas instituciones que tienen este tipo de programas.