El presidente francés, François Hollande, consideró que las acusaciones del presidente sirio, Bachar Al Asad, de que habrá repercusiones en caso de una intervención refuerzan su voluntad de actuar, pero deseó que esa posible actuación se haga dentro de una coalición lo más amplia posible. "Aquellos que tenían dudas sobre las intenciones de Al Asad, ya no las pueden tener. Habla de liquidar a todos los que no están de acuerdo con él. Podría haber dicho gasear", señaló Hollande tras haberse reunido en París con el presidente alemán, Joachim Gauck.

El jefe del Estado francés apeló a que cada país "asuma su responsabilidad", destacó que Francia tiene una "responsabilidad particular", y avanzó que va a haber una reunión "muy próximamente" a nivel europeo para abordar la respuesta que debe darse.

En una comparecencia en la que los dos presidentes expresaron su "misma indignación y condena" ante el ataque del pasado 21 de agosto a las afueras de Damasco, Hollande se refirió a la entrevista en Le Figaro en la que Al Asad advertía de que el "caos y el extremismo" se apoderarían de Oriente Medio en caso de que la comunidad internacional intervenga."La amenaza más seria sería dejarle hacer, dejarle masacrar a una parte de su población, amenazar al conjunto de la región. (...) Tomaremos las precauciones para hacerle frente, pero la amenaza no cesará mientras siga el régimen de Al Asad", añadió el jefe de Estado galo.

Para Hollande, "cuando una masacre química se produce, el mundo está informado, las pruebas se han entregado y los culpables son conocidos debe haber una respuesta", razón por la que este tema se va a tratar en la próxima cumbre del G-20 en San Petersburgo.

El presidente de EE UU, Barack Obama, pidió un voto "rápido" en el Congreso sobre una acción militar "limitada" contra Siria, y se mostró confiado en que logrará la autorización de los legisladores para llevar a cabo ese ataque. "Quiero enfatizar una vez más que lo que estamos diseñando es algo limitado, algo proporcional", que reducirá la capacidad del régimen del presidente Bachar al Asad, dijo Obama al inicio de una reunión en la Casa Blanca con los líderes republicanos y demócratas en el Congreso. Además, expresó su agradecimiento a los legisladores por la intención de celebrar la votación "tan pronto como el Congreso regrese la próxima semana" al trabajo.

El presidente de la Cámara de Representantes de EE UU, John Boehner, republicano, dijo que "apoya" la petición del presidente Barack Obama para lanzar un ataque militar contra Siria. "Esto es algo que Estados Unidos, como país, necesita hacer", dijo Boehner en declaraciones a los periodistas al salir de una reunión con Obama y otros líderes demócratas y republicanos del Congreso celebrada en la Casa Blanca.  "Nuestros aliados tienen que saber que Estados Unidos está con ellos cuando es necesario", añadió el dirigente republicano.