Antes de final de año es el plazo dado por el presidente de la Diputación de Málaga, Elías Bendodo, para que culmine el proceso de fusión en un solo ente del Patronato de Turismo de la Costa del Sol, la Sociedad de Planificación y Desarrollo (Sopde) y la Empresa Pública Provincial para la Vivienda de Málaga (Emprovima). La entidad resultante se dedicará a la planificación y promoción turística.

Turismo Costa del Sol, SA, integrada por trabajadores de la Sopde, de Emprovima y del Patronato de Turismo, será "una gran empresa turística", en palabras de Bendodo, quien anunció está fusión hace ya más de un año. La principal dificultad radica en determinar "la fórmula jurídica de encaje", especialmente en lo que al órgano promocional se refiere, en tanto que es una asociación.

Bendodo ha asegurado, en una entrevista concedida a Europa Press, que en este próximo mes de septiembre "se darán pasos importantes" en cuestiones relativas a modificación de estatutos, de modo que para finales de este año 2013 pudiera estar operativo el nuevo modelo de gestión turística de la Costa del Sol, con la creación de esa empresa pública.

Precisamente, en ese ajuste del sector público impulsado desde el equipo de gobierno del PP, que, en el caso de la Diputación, se ha traducido en estos dos años en una reducción de la plantilla del 21 por ciento, con un ahorro anual de entre 13 y 14 millones de euros, y en el del Patronato de Turismo, pasar de 40 a 28 trabajadores, Bendodo ha pedido a los presidentes de las empresas dependientes de la entidad provincial que estudien su viabilidad económica y determinen si es necesario disminuir el personal, así como que avancen en la fusión de estos tres entes.

Nuevo rumbo económico

Ha recordado que cuando el PP llegó a la institución supramunicipal, tras las elecciones municipales de 2011, "la situación era prácticamente de quiebra técnica, con dificultades para pagar las nóminas del mes siguiente". Sin embargo, ha añadido, "después de dos años aplicando un intenso plan de austeridad y ajustes importantes, sabiendo priorizar, fiscalizando hasta el último céntimo y reduciendo el número de personas con capacidad de gasto, puedo decir con satisfacción que hemos reconducido el rumbo económico de la Diputación".

"La Diputación de Málaga ha pasado de la quiebra a ser, en la actualidad, una institución solvente, inversora y que cumple puntualmente con los proveedores, a los que paga en menos de 30 días", ha manifestado. No obstante, ha dejado claro que el objetivo es seguir avanzando en esa línea: "no gastar ni un céntimo más de lo ingresado".

Como datos, ha resaltado que se haya pasado de una deuda de 218 millones de euros y un déficit de 40 millones en 2011 a un superávit de 43 en 2012, "el primero en cinco año". "Esto se ha conseguido —ha aseverado— con austeridad, pero también con una mejor gestión de los recursos públicos".

En estos dos años de gobierno la Diputación ha transferido a los municipios 110 millones de euros para actuaciones de diversa índole. Así, Bendodo ha puesto en valor no solo el superávit, sino también "el abono de 65 millones de euros de deuda bancaria y la mayor ejecución presupuestaria de los últimos siete años, con una inversión total de 215 millones y la generación de más de 7.000 empleos directos".

Cumplidas las dos primeras fases que se marcó el equipo de gobierno que lidera Bendodo —pagar a proveedores y ayudar a los ayuntamientos, apoyándoles en su gestión diaria, tanto con los servicios como con transferencias de capital—, se inicia ahora la tercera, que, según ha explicado, "está centrada en el ciudadano, en mejorar su calidad de vida".

"Queremos estar más cerca del ciudadano, escuchar sus propuestas e incorporarlas a nuestras acciones de gobierno", ha señalado el presidente de la Diputación, agregando que ello implica "atender de forma más cercana y directa a aquellos colectivos que trabajan en la provincia".

Reforma local

En cuanto a la plantilla, al menos en el caso concreto de la Diputación, no cree que sean necesarios más reajustes, después de haber conseguido "mejorar los servicios y hacer más operativa la institución", sino que "lo que se tiene que empezar a hacer es redefinir sus funciones y adaptarse a la futura reforma de la Administración local".

En este punto, se está a la espera de determinar cómo queda la normativa y cómo se materializan las necesidades derivadas de prestar un mayor servicio a los municipios. De todos modos, Bendodo se ha mostrado convencido de que no será necesario aumentar la plantilla actual.

Según el máximo responsable de la Diputación, el reto planteado hace dos años sigue "perfectamente vigente, habiéndolo, incluso, potenciado", que es que "todos los ciudadanos de la provincia tengan las misas oportunidades, vivan en el interior o en el litoral, en un pueblo pequeño o en uno grande".

Preguntado por el presupuesto de la entidad provincial para 2014, a falta de conocer las previsiones del Gobierno central, Bendodo ha afirmado que será "continuista, inversor y garantizará las políticas sociales".