El portavoz parlamentario del PSdeG, Abel Losada, ha optado este lunes por mantener "un silencio discreto" sobre cuáles son sus preferencias en relación a los candidatos que concurrirán a las primarias consultivas de septiembre para renovar el liderazgo de su partido y ha manifestado su convicción de que "una nueva dirección tiene que tener nuevos equipos".

Tras descartarse, "por vez número n", de la carrera por sustituir a Pachi Vázquez al frente del PSdeG, Losada ha insistido en que "toca hablar a los militantes" y ha esgrimido que, si bien como militante tiene su opinión y votará en consecuencia, este lunes comparecía como portavoz parlamentario socialista por lo que entiende que debe ser prudente.

"Que no se entienda como un principio de esquizofrenia, pero aquí estoy como portavoz, no como militante del PSdeG", ha bromeado el socialista, que, en todo caso, ha rechazado que otros pronunciamientos como los realizados por los exministros Francisco Caamaño y José Blanco "desvirtúen" el proceso.

A su juicio, hay pronunciamientos y "opiniones legítimas" en el partido, pero el protagonismo debe ser de los "militantes", que elegirán a su líder con "voto secreto" y sin "dedazos" en un proceso que se ha conseguido tras superar un camino "duro". "Ahora toca hablar a la militancia y, cuanta más pluralidad, mejor", ha sentenciado.

Sobre los cambios que podría haber en el grupo cuando la nueva cúpula tome las riendas del partido y en un escenario en el que voces del PSdeG apuntan a la posibilidad de que Francisco Caamaño le releve al frente de la portavocía en O Hórreo, Losada ha instado a preguntar al respecto "al nuevo secretario xeral" cuando éste sea ratificado por el congreso.

En cualquier caso, ha afirmado que él cree que "una nueva dirección tiene que tener nuevos equipos". "Es evidente, lo normal, lo habitual y perfectamente razonable", ha aseverado, en la jornada en la que se abre el plazo para la recogida de avales con dos aspirantes confirmados: el presidente de la Diputación de Lugo, José Ramón Gómez Besteiro, y el alcalde de A Illa, Manel Vázquez.