La agencia de calificación Moody's ha revisado la calificación de Laboral Kutxa manteniendo tanto su rating de largo plazo (Ba1), como el de fortaleza financiera (D+), situando este último en revisión a la baja. Estos ratings siguen situando a la entidad como una de las siete entidades financieras con mejor calificación del Estado.

Según ha informado Laboral Kutxa, Moody's justifica sus expectativas de rebaja en la creencia de que, dada la delicada situación de la economía española, en el futuro podría verse afectada la calidad de los activos de la entidad, tanto la de los relacionados con las compañías inmobiliarias como los pertenecientes a otros sectores económicos.

Los préstamos problemáticos de Laboral Kutxa se incrementaron a lo largo de 2012, situándose la morosidad en el 7,8 por ciento a cierre de marzo de 2013. En cualquier caso, una cifra sensiblemente inferior a la media del sector que se encuentra en el 11,31 por ciento, según los últimos datos disponibles.

No obstante, Laboral Kutxa cuenta con un alto nivel de Capital Principal, que se sitúa en el 10,83 por ciento a marzo de 2013, lo cual unido a sus "buenos ratios de liquidez y eficiencia, confirma la buena posición de Laboral Kutxa para afrontar escenarios de estrés con condiciones económicas especialmente adversas", ha explicado la entidad vasca.