El delegado del Gobierno en Galicia, Samuel Juárez, ha recibido este miércoles al coronel Isaías Alejandro García Poncio, jefe del Aeródromo Militar de Santiago, en un encuentro en el que han hablado de la Propuesta de Racionalización y Utilización Eficiente del Patrimonio Inmobiliario del Ministerio de Defensa, que prevé la desactivación temporal del aeródromo militar de Lavacolla fuera de temporada de alto riesgo de incendios, por lo que operará tres meses.

Según informa la Delegación del Gobierno en Galicia, en concreto, coincidieron en la conveniencia de "maximizar la eficiencia" de las infraestructuras de Santiago, adaptando la operatividad del aeródromo militar de Lavacolla a la actividad en sus instalaciones.

En este sentido, se recordó, según indica la Delegación del Gobierno en Galicia, "que no parecía justificado mantener una instalación con personal y gastos fijos todo el año si solo se usan las instalaciones durante tres meses", cuando presta servicio a los aviones que participan en la extinción de incendios.

De este modo, según añade la Delegación del Gobierno, "se garantiza y compatibiliza la lucha contra los incendios forestales en Galicia y se incurre en gastos fijos durante los tres meses de operatividad real del aeródromo militar".

En este sentido, cuando la Comisión del Prepidef estudió el cierre de esta instalación, el Ministerio de Defensa "tuvo ya en cuenta que el despliegue contraincendios del Ejercito del Aire impedía cerrar definitivamente el aeródromo", recuerdan las mismas fuentes. Para ello, se ha planificado el tiempo de actividad del mismo y se ha planteado la desactivación temporal durante nueve meses, "manteniendo con normalidad su actividad durante tres, prestando de este modo el habitual servicio en el despliegue de los aviones de extinción de incendios del Ejército del Aire en Lavacolla".

El Ejecutivo central ha decidido cerrar 86 instalaciones, en su mayoría subdelegaciones provinciales, y de trasladar su personal a otros edificios militares. Defensa, que realizó el anuncio de cierres que incluye Lavacolla, estima que el ahorro por cerrar el aeródromo militar de Santiago alcanza los 197.258 euros.