El portavoz del Grupo Juntero del PNV en Álava, Ramiro González, ha hecho público este viernes un documento de la Comisión Europea que ratifica que la Central Nuclear de Santa María de Garoña (Burgos) "no podrá volver a introducir combustible nuclear en sus reactores sin una autorización expresa del Consejo de Seguridad Nuclear", que está condicionada por las mejoras de diseño previstas tras los test que se realizaron en todas las centrales europeas tras el accidente de la central nuclear de Fukushima.

En un comunicado, el PNV ha informado de que en el citado documento, el Comisario europeo de energía, Gunther Oettinger, recuerda que la central se encuentra actualmente parada ya que no hay combustible en el reactor, y que la concesión de una prórroga en la explotación de la central "requeriría la modificación de la orden ministerial que fijaba como fecha de cierre definitivo de la central el próximo sábado seis de julio de 2013".

El portavoz del Grupo juntero PNV, Ramiro González, ha reivindicado que "Garoña debe cerrar definitivamente a partir de este sábado, fecha tope para el cese definitivo de la explotación de esta central" ha explicado.

En este sentido, ha señalado "como ha ratificado la Comisión Europea, si Garoña no cumple con las mejoras previstas tras los test que se realizaron en todas las centrales europeas tras el accidente de Fukushima, no será posible recibir ninguna autorización para volver a introducir combustible nuclear en sus reactores lo que "impide cualquier posibilidad de prórroga".

González ha asegurado que en el documento europeo se detallan las instrucciones vinculantes que deben cumplir todos los operadores y titulares de licencias hasta 2016 y se manifiesta que es "imprescindible" el cumplimiento de dichas reformas para mantener abiertas las instalaciones.

Pnv en la eurocámara

La eurodiputada de PNV Izaskun Bilbao, según ha explicado, dirigió una pregunta al comisario europeo de la Energía, Gunther Oettinger, en la que recordaba que la Central Nuclear de Garoña no ha concluido aún las reformas que debe acometer para superar las deficiencias de seguridad que se detectaron en la misma tras el accidente de Fukushima.

Asimismo, solicitó información a las autoridades europeas preguntó sobre el grado de conocimiento que tenía sobre la situación Garoña y recordó que los test de resistencia europeos demostraron que "no resiste terremotos de la intensidad que exige el regulador, que presenta riesgo de inundación muy alto en caso de rotura de las presas cercanas y que tiene deficiencias en la custodia y protección del combustible gastado en caso de pérdida de los sistemas de refrigeración".