La fiscal en el juicio contra José Bretón, que comenzó este lunes en Córdoba, aseguró en su presentación al jurado que no tiene ninguna duda de que el procesado mató a sus hijos de la forma "más cruel posible" y de que se ha inventado un "cuento" para declararse inocente.

Un tribunal popular juzga desde este momento a Bretón por el asesinato de sus hijos Ruth y José, que tenían 6 y 2 años cuando el acusado denunció su desaparición en un parque de Córdoba el 8 octubre de 2011. Son siete mujeres y cuatro hombres, nueve titulares (siete mujeres y dos hombres) y dos suplentes (hombres); la vista oral se prolongará en principio hasta el 8 de julio.

En esta primera jornada realizaron sus exposiciones iniciales el fiscal y las partes, mientras que el acusado no declarará hasta el martes y su exmujer, Ruth Ortiz, lo hará un día después.

La fiscal María Ángeles Rojas, la primera en hablar, instó al jurado a que no se deje influir por la repercusión mediática que ha tenido el caso y a que deseche cualquier idea preconcebida.

Especializada en casos de violencia en el ámbito familiar, la fiscal les dijo a los miembros del jurado, sin embargo, que no tiene duda alguna de que José Bretón mató a sus dos hijos, Ruth y José, de 6 y 2 años en el momento de los hechos, de la forma "más cruel posible" y aprovechando que los tenía bajo su custodia. Y para eludir su delito, continuó la fiscal, quemó a los niños en una hoguera a "temperatura altísima".

"Su historia se ha desmontado poco a poco", insistió la fiscal antes de advertir a los miembros del jurado de que todo lo que escuchen el martes en la declaración del acusado será producto de un "cuento inventado por él", de "pura fantasía". La fiscal ha querido desmontar la versión de la defensa, que "aún entiende" que Bretón perdió a los niños en el parque y que, a pesar de las pruebas, cree que los huesos hallados no corresponden a los niños.

Por su parte, María del Reposo Carrero, la abogada de la acusación particular, dijo durante su turno que tiene la sospecha de que el acusado también quería quemar a su exmujer en la pira donde supuestamente quemó a los pequeños.

De "atrocidad" calificó la abogada la muerte de los niños, en una intervención en la que reconoció que le costaba trabajo imaginar que una persona sea capaz de asesinar a su hijos. "No es un caso de un señor preso de una locura. No es un acto de un loco, ni un impulso, ni un arrebato, ni una circunstancia humanamente comprensible", sino que "estamos en presencia de un monstruo, de una persona malvada", ha enfatizado la letrada.

Según Carrero, la "pira funeraria", la "enorme candela alargada" que preparó en la finca de Las Quemadillas estaba destinada también para su exmujer, a la que llamó ese día tres veces por teléfono, aunque Ruth Ortiz no cogió las llamadas.

Por último, José María Sánchez de Puerta, defensor de José Bretón, dijo que el procesado ya ha sido "crucificado" desde el primer momento y "condenado" por la opinión pública en un juicio paralelo que le ha "marcado" de por vida.

Se le ha tachado de "demonio" y de "Satanás", pero Bretón "no es así", enfatizó el letrado antes de explicar que ha visto llorar a su defendido, que ha preguntado constantemente si se sabía algo de sus hijos y que "jamás" ha hablado de ellos en pasado, sino "siempre en presente".

Tras afirmar que Bretón sigue en la creencia de que sus hijos están vivos, el defensor dijo que "no se sabe a ciencia cierta cómo mueren los niños" y que es "temerario" que los hechos se califiquen como asesinato.

Sánchez de Puerta tuvo que ser recriminado por el presidente del tribunal cuando ha relatado que el antropólogo y forense Francisco Etxeberria y la Policía abrieron la caja que contenía los supuestos huesos de los pequeños dos horas antes de que se autorizara.

Por ello, el letrado consideró que esta prueba, que determinó que los huesos eran de humanos inmaduros, "carece de valor", pero el presidente del tribunal le recordó que es válida porque fue constatada por el Tribunal Superior de Justicia y, por tanto, le pidió que no polemizara.

Treinta estudiantes de la Facultad de Derecho de la Universidad de Córdoba (UCO) asisten como público al juicio, presidido por el juez Pedro Vela y en el que declararán un total de 98 testigos y 46 peritos.

Bretón, que se enfrenta a una petición del fiscal y de la acusación particular de 40 años de cárcel —su defensa pedirá la absolución—, llegó a la Audiencia desde la prisión de Alcolea (Córdoba) en un furgón de la Policía Nacional en torno a las 10.30 horas de este lunes. Tranquilo y sin esposas, asistió a la lectura por parte del secretario de los escritos de las acusaciones.

Custodiado por dos agentes de la Policía Nacional, apenas se inmutó durante la lectura. A las 11.55 h y a petición de la defensa, los agentes procedieron a quitarle las esposas al acusado, aparentemente muy tranquilo y sin alterar el gesto. Los problemas de sonido, que no llegaba a los monitores instalados en la sala de prensa, fueron la única incidencia.

Durante la sesión, el magistrado ha admitido dos nuevos testigos solicitados por la defensa, concretamente la hermana de Ruth Ortiz, la madre de los dos niños supuestamente asesinados, y su excuñada, al tiempo que la acusación particular ha advertido que dichas personas tienen "graves" problemas de salud mental.

El fiscal jefe de Córdoba, José Antonio Martín Caro, cree que el juicio contra José Bretón por el asesinato de sus hijos, Ruth y José, el 8 de octubre de 2011 "no es un juicio fácil, ni habitual, ni sencillo" y ha confiado en la "disposición" y la "mejor voluntad" de todos.

En una entrevista en Espejo Público, Martín Caro ha dicho que se trata del juicio que "más seguimiento" ha tenido de todos los que se han celebrado "nunca" en la provincia de Córdoba y ha pedido la colaboración de los medios de comunicación para "trasmitir confianza en la justicia".

Con respecto al jurado popular que juzgará a Bretón, el fiscal jefe ha defendido que hay personas "suficientes" para que formulen una "adecuada solución" y, sobre la poca confianza de la defensa en los jurados populares, ha dicho que ésta es "libre de adoptar la estrategia que estime" oportuna y ha previsto que la misma no supere los "límites inaceptables".

Martín Cano ha subrayado que Bretón está en "su derecho" de mantener hasta el final la postura que ha adoptado hasta ahora y que el trabajo de la Fiscalía se centrará en "demostrar al tribunal que las cosas han ocurrido de otra forma".

De ese modo, ha explicado que el ministerio público está preparado para "refutar los muchos argumentos" de la defensa pero, "básicamente", se centrará en presentar ante el tribunal "pruebas, indicios y datos" para que éste pueda pensar en su misma tesis.

Así las cosas, ha recordado que el debate se produce ahora ante el tribunal y ha confiado en que éste condene a Bretón "en base a documentos y pruebas aportadas en el juicio".