El juicio celebrado en la Audiencia Provincial de Ourense contra Angelo Alex O. 'el Brasileiro' por intento de homicidio contra José F. B. 'Paspayo' comenzó y terminó con declaraciones breves del acusado para decir que el acuchillamiento de su amigo "fue un accidente" y juró por sus hijas que "jamás" tuvo intención de matar a nadie.

El acusado, según la narración de los hechos de la fiscal, tomó unas copas una noche de octubre de 2011 con su hija de 18 años, con el novio de ésta, con su víctima y la pareja de ésta en aquel momento Susana Paula R.C., y en un momento dado protagonizaron en una calle de Celanova un altercado, interrumpido por agentes de la Guardia Civil.

Luego se separaron y el acusado fue a su casa acompañado de la novia de su amigo. La víctima José F.B. fue a buscarla acompañado de otra persona a la casa del acusado, donde supuestamente recibió de Angelo Alex O. una puñalada en el pulmón derecho que quedó a poco más de un centímetro del corazón y que pudo causarle la muerte, según los peritos.

Intento de homicidio

La fiscal y la acusación particular coincidieron en la calificación del delito como intento de homicidio, con una condena de 6 años de prisión y alejamiento de su víctima e incomunicación con ella durante cinco años, a lo que suma el pago al Sergas de 4.300 euros y a la víctima de otros 15.839 por las secuelas, cifras que la acusación particular aumenta.

La acusación pública considera que cuando 'Paspayo' fue a casa de 'el Brasileiro' para buscar a su novia, ésta abrió la puerta tras los golpes de su novio, y fue agredida con un tirón de pelos para llevarla con él "y sin duda hubo una discusión en la que el acusado cogió un cuchillo de su cocina y con intención de causar daño o acabar con su vida, lo clavó a la víctima".

La intención de matar, según la fiscal, "sólo está en la cabeza del acusado pero puede demostrarse con elementos como el golpe asestado con el cuchillo, único, concreto y certero en el pulmón que pudo llegar al corazón, y con gran fuerza para atravesar las tres prendas que llevaba la víctima". "Y no es posible que la herida se produjese al abalanzarse la víctima sobre el agresor, pues el herido tiene además cortes en una mano que son heridas defensivas", añade.

La fiscal y el abogado de la acusación incidieron en la "intención de matar" corroborada, según ellos, por el lugar del cuerpo donde se asestó la cuchillada y por la ausencia de auxilio, "pues si no quisiera matar, el acusado pediría ayuda al ver el charco de sangre alrededor de su víctima, y no la habría empujado para echarla de su casa, cerrarle la puerta y dejarla desangrándose en el rellano, ni se habría ido tranquilamente a su cama, desoyendo las patadas en la puerta del herido, que llegó desarmado a buscar a su novia", relató el abogado de la acusación Alfonso Grande.

La acusación pública descartó eximentes aducidas por la defensa como el excesivo consumo de alcohol del acusado, la legítima defensa y el miedo insuperable pues consideró que no quedaron probados tras los testimonios de varios agentes de la Guardia Civil, la novia del herido Susana Paula, las hijas del acusado y su madre, además de varios peritos.

Por su parte, la defensa mantuvo la petición de un mes de prisión por un delito de lesiones imprudentes y rechazó el pago de indemnización alguna "porque el herido desoyó las instrucciones recibidas del 061 por la persona que le acompañó a casa de Angelo, al quedar herido en el rellano pues le dijeron que se tirara al suelo y se colocase de lado para taponar la herida. Sin embargo, se levantó para seguir golpeando la puerta", detalló.

La legítima defensa del acusado, en respuesta a agresiones sufridas por Susana Paula R.C., las justificó por el bofetón que la víctima dio a su hija menor de edad y por empujones a él mismo, y habló de "miedo insuperable" por los antecedentes de 'Paspayo'.

Asimismo, recordó que esa noche ambos bebieron "mucho" a pesar de que ni los agentes de la Guardia civil ni la médico que le atendió siguiendo el protocolo para detenidos detectaron síntomas de que estuviese alcoholizado, sino lo contrario, pues relataron que estaba tranquilo.

Víctima por segunda vez

La víctima en el juicio del jueves en Ourense, José F. B. 'Paspayo', de 60 años, es conocido desde los años 90 por sus detenciones por incautación de 1,5 kilos de heroína, vehículos de alta gama y armas, entre otras; estancias en diferentes prisiones de España, procesos judiciales en Ourense y Celanova, y uno más en la Audiencia Nacional por falsificación de moneda y por varios sucesos relacionados con él.

Su condena por varios delitos relacionados con el tráfico de droga sumó 25 años de prisión que comenzó en Pereiro de Aguiar (Ourense), donde estuvo unos años y comenzó a disfrutar del régimen de tercer grado durmiendo en la prisión y pasando el día fuera, hasta que personas nunca identificadas dejaron una bomba ante la puerta de su casa en Celanova, cuando Fernández Blanco no estaba en ella, que explotó y provocó daños en todo el edificio y heridas a una vecina en enero de 2003.

Pasó luego por una prisión cántabra y por la salmantina de Topas, para cumplir condena hasta marzo de 2011, pero aprovechó un permiso ocho meses antes para fugarse y, mientras estaba en búsqueda y captura, empujó a un agente policial en un control de alcoholemia en Madrid para darse a la fuga.

Un mes y medio después de su fuga fue capturado en la ciudad de Ourense y a su condena se le sumó la correspondiente por agresión y resistencia a la autoridad.

El juicio del jueves, en la Audiencia Provincial, se produce tras el segundo ataque que sufre 'Paspayo', aunque es la primera vez que su agresor se sienta en el banquillo, pues los autores de la bomba colocada en la puerta de su casa nunca fueron identificados.