Galicia pide "discriminación positiva" para las que cumplan, la Comunidad de Madrid recuerda que es la más "solidaria", Extremadura clama contra un pacto con Cataluña y Aragón pide un déficit único. Varias autonomías del PP han reaccionado así ante las palabras de Mariano Rajoy, que instó a las regiones a tener "generosidad" y "altura de miras" en este asunto.

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha aceptado una generosidad recíproca en el caso de las comunidades que no puedan cumplir con el objetivo de déficit, pero cree que las que lo hagan y no sean "un problema", como la suya, deben tener cierta "prioridad" en el acceso "a determinados fondos estatales.

Así, ha defendido que cumplir con el déficit "no es otra cosa que priorizar los gastos y no gastar más de lo que se tiene" y que no se hace porque sea "una obsesión contable", sino por "ordenar los escasos recursos" que hay para "apuntalar sanidad y educación" pese a la crisis. Dicho esto, ha enfatizado que el Gobierno ha ayudado "más que ningún otro" a las comunidades con "muchos problemas".

El Ejecutivo sigue ayudando a las comunidades "con especial dificultad", con las que Galicia, ha agregado "es respetuosa". "Entendemos que esas comunidades necesitan unas ayudas, de la misma forma que también creo que la generosidad con las autonomías que no cumplen el déficit no puede perjudicar a las que sí lo hacen", se ha reafirmado.

Por su parte, el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, ha dicho que su Gobierno regional no solo ha demostrado que es "sensato" sino que, además, es el que más aporta al Fondo de Solidaridad y está dispuesto "a seguir haciéndolo".

Lo que en ningún caso aceptará su Ejecutivo, ha explicado, es "asumir un modelo de financiación que perjudica gravísimamente a los madrileños". Además, ha recordado cómo perjudica el actual modelo de financiación a Madrid, a la que ha "quitado mil millones de euros" que los madrileños "pagan con sus impuestos"; y ha señalado que con el objetivo de déficit "pasa lo mismo".

"Tiene que ser un objetivo conjunto porque es un objetivo de país y nosotros estamos con que todo el mundo cumpla el mismo objetivo", ha apuntado. Por lo tanto, ha explicado que por debajo del 1,2% que se ha fijado para las comunidades, no se entendería "que se beneficiasen a las comunidades que han incumplido y se perjudicase" a las que sí 'han hecho los deberes'.

La Junta de Extremadura, por otro lado, ha advertido al Gobierno central de que no permitirá que se beneficie a Cataluña a costa de las comunidades autónomas cumplidoras con los objetivos de déficit y ha sostenido que "la lealtad y el cumplimiento deben ser recompensados en aquellas regiones que han hecho un esfuerzo".

Lo ha comunicado en una nota de prensa, en la que ha manifestado que actuará con "generosidad, sensatez, sentido común y altura de miras" y siempre dentro de la Constitución, además de recordar que en materia de déficit primero se modificó la Carta Magna y luego Hacienda advirtió a las autonomías de que era obligatorio cumplir.

"Ahora Hacienda quiere flexibilizar a quien dice no a la Constitución y también a Hacienda", ha destacado el Ejecutivo de José Antonio Monago, a la vez que ha reiterado que la aprobación de los objetivos de déficit para el periodo 2012-2014 contó con el consenso y el compromiso de las comunidades.

Para el Gobierno de Extremadura, es precisamente ese consenso el que debe sostener las actuaciones futuras, por lo que cualquier región que quiera excederse del 1,2% del déficit debería "pedir el voto de las demás regiones" en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera, órgano competente en la fijación del déficit.

Por otra parte, el Ejecutivo autonómico ha subrayado que algunas de las regiones que ahora piden "un trato especial plantaron recientemente" al Gobierno central y a las demás comunidades precisamente en asuntos relacionados con el déficit.

Por último, el Gobierno de Aragón ha dicho que pedirá que todas las autonomías tengan el mismo objetivo de déficit en 2013, es decir, que todas asuman el objetivo que finalmente Bruselas acepte para España.

El consejero de Presidencia del Gobierno de Aragón, Roberto Bermúdez de Castro, ha insistido en que el ejecutivo no ha variado "ni un ápice" su opinión respecto a este asunto, y que el déficit debe ser "igual para todos". "Es una línea roja", ha enfatizado.

"Todos los ciudadanos españoles, vivan donde vivan, son iguales", ha añadido, y por eso todos tienen "los mismos derechos", en el sentido de que adoptar un objetivo de déficit u otro permite tener más o menos recursos a las autonomías y, por tanto, prestar más o menos servicios esenciales.

Por eso, ha dicho que cada vez que escucha a "algún portavoz del gobierno catalán" decir que Cataluña debe tener un objetivo más alto que las demás tiene más claro "que el déficit debe ser el mismo". "Mientras algunos nos hemos ajustado, otros siguen gastando en embajadas y otras cosas", ha lamentado.

No obstante, Bermúdez de Castro ha emplazado a esperar a la próxima reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera, en el que se fijarán los objetivos, sin adelantar cuál será el sentido del voto del gobierno de Aragón, aunque con una propuesta de objetivo "asimétrico" el ejecutivo "estará, en principio, por el no".

El portavoz del Ejecutivo andaluz, Miguel Angel Vázquez, por otra parte, ha defendido que hay que buscar unos objetivos claros a la hora de adjudicar el nivel de déficit de este año para las comunidades y, una vez definido ese marco de reglas nítido, aplicar unos criterios individualizados a cada región, porque las circunstancias son distintas en cada territorio.

Ha señalado que la Junta está manteniendo reuniones bilaterales con el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, y ha agregado que Andalucía parte de una situación "buena", de poca deuda y con un déficit razonablemente contenido, pero necesita contar con los fondos suficientes para hacer frente al desarrollo de importantes políticas sociales.

Miguel Angel Vázquez ha criticado que el Estado tenga para este año el mismo nivel de déficit para este año, mientras se quiere "apretar" mucho a las comunidades autónomas.