El fervor que la serie The Walking Dead provoca en Internet y en la televisión estadounidense no termina de reflejarse en los índices de audiencia de La Sexta, cadena encargada de emitir en abierto la ficción sobre zombies.

Este jueves, pese a que se emitía el final de la tercera temporada y que se había anunciado que morirían en él dos de los principales personajes, los dos capítulos proyectados (Esta triste vida y Bienvenidos a las tumbas) no consiguieron alcanzar el 7% de cuota de pantalla. El primero de ellos marcó un 6,1%, y el segundo, un 6,6%, siendo seguidos por 1.226.000 y 1.147.000 espectadores respectivamente.

Ya el pasado mes de marzo la serie considerada de culto por numerosos televidentes regresó a la parrilla de La Sexta discretamente, obteniendo un 6,5% y un 7.2% con sus dos primeros episodios, y únicamente el 25 de abril logró marcar un 8%, su máximo de temporada.

Nada que ver con los doce millones de personas que vieron el primer capítulo de la última temporada en Estados Unidos, donde fue emitido por la cadena de clable AMC el pasado 10 de febrero. También la cadena FOX estrenó el mismo capítulo en España un día después, reuniendo a más de 320.000 espectadores.

La parrilla del jueves estuvo protagonizada por otro adiós, también fue moderado. Fue el de La noche de José Mota, que despidió su primera temporada en Telecinco sin grandes alardes y con solo seis décimas por encima del dato cosechado en la semana anterior (en total, un 11.7%).

El líder del jueves fue de nuevo la serie Cuéntame cómo pasó, que no se vio afectada por una caída de tres décimas (hasta el 21,8%) para capitanear las estadísticas.

En cuanto a Gran Hermano: El debate, que coincidió con la polémica expulsión disciplinaria de una de sus participantes, la de Argui, permitió obtener un 20,2% en la franja del late night, si bien dicho share fue algo más bajo que el del anterior programa (22,5%).