«Nos han mentido en todo. Nos prometieron pisos de protección y todavía no sabemos nada», asegura María Teresa Mulet, una de las vecinas de Baiona que tuvo que ser alojada en un hotel  el pasado 22 de octubre.

Como ella, medio centenar de vecinos de las localidades pontevedresas de Oia y Baiona siguen sin tener una vivienda y continúan en hoteles. Precisamente en Baiona, el Concello ha recogido ya 266 expedientes de vecinos y comerciantes que han sufrido las consecuencias de las riadas. Las lluvias de los últimos días han hecho que los operarios de Vilagarcía (Pontevedra) retirasen ya 100 toneladas de lodo en comercios y calles inundadas.

Además, 1.180 alumnos de la provincia de Pontevedra continúan sin asistir a clase. Sin embargo, la flota de bajura retomó la actividad tras más de una semana amarrada.

La Xunta ha anunciado que ampliará las ayudas –fijadas en diez millones de euros–. El decreto, según confirmó el Gobierno autonómico a 20 minutos, se va a tratar hoy en el Concello.

El dinero prometido

Viviendas: El Gobierno de la Xunta asumirá la totalidad del gasto de reposición o reparación de una vivienda dañada en el caso de ser permanente y habitual. Para las segundas viviendas, la Xunta asumirá el 40% del gasto.

Daños personales: Las personas que hayan sufrido daños físicos como consecuencia de las riadas serán indemnizadas por la Xunta con subvenciones que oscilarán entre los 60 y los 103 euros.

Efectos irreparables: En el caso de muerte o incapacidad total permanente por los efectos del temporal, el Gobierno autonómico concede ayudas de 18.000 euros.