La parroquia de Santa María Magdalena de Malagón (Ciudad Real) ha acogido en la tarde de este lunes a un gran número de vecinos que se han acercado al funeral celebrado por Emiliano Expósito, el hombre de 82 años que falleció este lunes en Fuencaliente al derrumbarse un puente de la N-420.

"Es una familia muy conocida en la localidad, él tenía cuatro hijos, y las circunstancias de la muerte de Emiliano han sido muy trágicas", ha explicado a Europa Press el alcalde de Malagón, Adrián Fernández, tras asistir al sepelio.

Antes de la misa, el primer edil también ha acompañado a los hijos del fallecido en el tanatorio de la localidad —donde el cuerpo ha llegado al mediodía— y ha destacado que la familia "está destrozada" porque no se explican cómo ha ocurrido algo así, al tiempo que no descartan presentar una denuncia por el estado en el que se hallaba la carretera y el puente en el que murió su padre.

"Aunque no hemos profundizado mucho porque no era el momento, sí que me han trasladado que van a analizar la situación antes de decidir qué hacen, ya que en caliente se pueden tomar medidas que no sean las más adecuadas. Van a analizarlo y a consultarlo", ha indicado Fernández, quien ha agregado que le han enseñado fotos del estado en el que estaba el puente "y la verdad es que es una pena".

Finalmente, el primer edil de Malagón se ha puesto a disposición de la familia tanto personal, como moral e institucionalmente, tras este trágico suceso.