La salida de conductores de Madrid para disfrutar de las vacaciones de Semana Santa en otras comunidades como Andalucía o la valenciana está colapsando la circulación en algunos puntos y, así, entre la capital y Saelices (Cuenca) se tarda por la A-3 hasta dos horas y cuarto para un tramo de 100 kilómetros.

Según fuentes de la Dirección General de Tráfico (DGT), en torno a las 13.30 horas la autovía de Valencia, la A-3, sufría importantes retenciones a la altura de Rivas-Vaciamadrid y Fuentidueña del Tajo, en Madrid, y en Tarancón (Cuenca).

Por su parte, en la A-4 o autovía de Andalucía la circulación era lenta Valdemoro y en el tramo entre Aranjuez y Ontígola, así como en La Guardia, Ocaña y Dos Barrios.

La A-5, que une Madrid y Extremadura, tenía complicaciones en Móstoles entre el Parque Coimbra y Navalcarnero, en la Comunidad de Madrid, y ya en la provincia de Toledo en Maqueda, Otero y Talavera de la Reina.

Los conductores que se dirigían al noroeste por la A-6 circulaban lentamente entre La Florida y Majadahonda, así como en La Rozas y en el entorno de los túneles de Guadarrama, mientras que la antigua carretera de La Coruña, la N-VI contaba con atascos entre el alto del León y San Rafael (Segovia).

Otras carreteras afectadas en la Comunidad de Madrid eran la A-1 entre San Sebastián de los Reyes y San Agustín de Guadalix; la M-501 en Pelayos de la Presa y San Martín de Valdeiglesias y la M-50 en Las Rozas en sentido A-6.

En Burgos, los problemas se detectaban en la A-1 en La Puebla de Arganzón; en Valladolid en la A-62 en Simancas por un accidente, y en Cantabria en la A-8 a la altura de en Torrelavega, Castro Urdiales y Unquera.

La segunda fase de la operación especial de tráfico de Semana Santa comenzó a las tres de la tarde de este miércoles y concluirá a las doce de la noche del lunes, 1 de abril, un periodo en el que se esperan 7,5 millones de desplazamientos.