La entidad Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) deberá pagar las obras necesarias para la insonorización de una vivienda situada junto al aeropuerto de Málaga, en la que reside un hombre que padece síndrome ansioso depresivo y pérdida auditiva por el ruido de los aviones.

Así lo ha resuelto un juez que, además, obliga a AENA a pagar al afectado una indemnización de 42.519 euros.

El afectado alegaba que su vivienda, construida en 1963, se encuentra a una distancia de 210 metros de la pista del aeropuerto y que se producen ruidos en el interior y en el exterior que "superan el máximo normativo".

En la sentencia se considera que el demandante ha probado que padece esas lesiones y que "tienen su causa desencadenante en el ruido que procede de los aviones y que ha de soportar dentro de su vivienda", ya que también demostró con informes técnicos que la casa está a esa distancia de la pista, lo que también reconoce AENA.

La sentencia indica que el ruido producido por los aviones penetra en el interior de una vivienda "construida con anterioridad a la ampliación de la pista" y precisa que la intensidad es tal que "produce una merma muy importante en las condiciones de habitabilidad".

Sin embargo, el magistrado rechaza la petición del perjudicado de 360.000 euros como valor en venta de la vivienda con la finalidad de transmitirla al ente público, al entender que "en ningún caso" se puede condenar a AENA a adquirir la casa "pues ya cuando se amplió la pista no se hizo necesaria su expropiación".