La consejera de la Presidencia e Igualdad de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha pedido al Gobierno central "sensatez" y que "reparta oxígeno" el próximo jueves en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) que dará cita a los consejeros de Hacienda de las distintas comunidades autónomas con el Ministerio, de forma que adopte el "compromiso" adquirido en la Conferencia de Presidentes.

En declaraciones a los periodistas en Sevilla antes de clausurar las jornadas de coordinación de los representantes socialistas en las Juntas Municipales de Distrito, la consejera andaluza ha pedido al Gobierno de Mariano Rajoy "sensibilidad" con las comunidades, resaltando el "importante esfuerzo" que han realizado a la hora de recortar gasto, destacando el caso de Andalucía.

Díaz ha instado al Gobierno a "abrir los ojos" en un país en el que "hay más de tres millones de cabezas de familia en desempleo" y se está produciendo "una brecha brutal" entre aquellos que más tienen y los que menos, señalando que desde el inicio de la crisis "esa brecha se ha visto aumentada en un 30 por ciento".

"Un país rico, con una renta per cápita como la que tenemos, no se puede permitir este empobrecimiento de la población", ha manifestado, señalando que decisiones como la adoptada este viernes en el Consejo de Ministros para "endurecer las condiciones para acceder a la jubilación" van "directamente al corazón de esas familias que se encuentran en situación más vulnerable".

Díaz ha criticado que el Ejecutivo de Mariano Rajoy gobierne "a golpe de decreto saltándose el Pacto de Toledo", que debe garantizar de cara al futuro un sistema de protección social que ha sido exitoso en estos años".

Asimismo, ha señalado que "lo que molesta" a los ciudadanos es que el Gobierno del PP se ampare en su mayoría absoluta para "establecer sus reformas estructurales por decreto-ley". "La mayoría absoluta le permite gobernar por decreto, pero la realidad de este país le llama a que haga otra cosa", ha apostillado.

Plan nacional de emergencia social

La consejera ha puesto el ejemplo de una familia de clase media con sus dos miembros trabajando, con unos ingresos de en torno a los 30.000 euros, que antes de la crisis hubiera adquirido una hipoteca por entre 15.000 y 17.000 euros, señalando si en estos momentos uno de los dos pierde su empleo, no pueden hacer frente a su compromiso hipotecario. "Esa es una realidad que está pasando en la calle, y el Gobierno no puede cerrar los ojos a eso", ha aseverado.

Por ello, la titular andaluza de Presidencia e Igualdad ha defendido que "todas las administraciones" tienen que poner todos los recursos que tenga en su mano para un Plan Nacional de Emergencia Social, señalando que la Junta "puede hacerlo", pues ya "destina 600 millones entre planes de choque, de acción social, solidaridad agroalimentaria", y que "seguro que las diputaciones, ayuntamientos y Gobierno también tienen bolsas similares.