Los grupos del Partido Socialista (PSOE), Chunta Aragonesista (CHA) e Izquierda Unida (IU) en las Cortes de Aragón han pedido al Departamento de Educación, Universidad, Cultura y Deporte del Gobierno aragonés que retire la orden aprobada el pasado 14 de febrero sobre el nuevo programa de bilingüismo para el curso que viene en la Comunidad autónoma y presente una nueva.

Los tres grupos han suscrito una proposición no de ley conjunta para su debate en el pleno del Parlamento aragonés que pide la retirada de la orden porque "impide la igualdad de oportunidades de los centros en el acceso al programa" e "introduce una devaluación de la calidad del actual modelo de bilingüismo", entre otras cosas.

El portavoz del PSOE en las Cortes, Javier Sada, el diputado de CHA, Gregorio Briz, y el portavoz de IU, Adolfo Barrena, han presentado en rueda de prensa esta iniciativa y han comentado que el Departamento todavía está a tiempo de modificar este programa de cara al próximo curso.

El diputado socialista Javier Sada ha recalcado que el bilingüismo es una "cuestión esencial" para el "futuro profesional" de los alumnos y ha criticado que "un programa que está bien valorado se cambie unilateralmente" hacia un modelo que "no va a fomentar la calidad", sino que refleja un "cambio puramente ideológico".

En este sentido, ha apuntado que en él "se trata de favorecer más a los centros que cuentan con más recursos y dejar fuera del sistema a los que menos tienen", de forma que "ahondará más en la falta de equidad y de cohesión social" y "los colegios de barrio o de los pueblos tendrán menos posibilidades por lo que se ahondará en el desequilibrio territorial".

Sin embargo, el anterior programa, suponía "planificación educativa por parte de la Administración, que decidía dónde implantaba, no donde era más fácil, sino donde se necesitaba" y "favorecía el equilibrio territorial", ha argumentado Sada.

Tensiones en la pública

El diputado de CHA, Gregorio Briz, ha asegurado que la orden ha "levantado polémica" en la escuela pública" ya que en ella se extiende el programa a centros públicos y privados y son los centros quienes deciden si se suman al programa, pero deben hacerlo "a coste cero", generando "tensiones" entre los claustros y los padres respecto a la implantación de un programa que, "si la Administración no pone más recursos, es complicado que se extienda".

A su entender, esto beneficiará a la concertada, que tiene mayor flexibilidad para contratar el profesorado, además de que "desde el punto de vista del proceso administrativo se favorece y agilizan los trámites a la privada y los complica a la pública", cuando ambas redes "no puede competir en igualdad porque los medios y recursos no son los mismos".

Por eso, ha opinado que el objetivo es "desmantelar el modelo de bilingüismo en la pública", que "funcionaba bien, aunque fuese mejorable" e "implantarlo de manera subliminal en la privada", en vez de utilizarlo para "dignificar y sacar a flote a muchos centros públicos", como se ha hecho hasta ahora.

Briz ha afirmado que la comunidad educativa de la escuela pública, tanto padres, profesores, como sindicatos, están solicitando la retirada de esta orden y que "se plantee una nueva que sea fruto del consenso y vaya en beneficio de la pública", de forma que sea el Departamento quien "planifique y organice", especialmente en un momento de crisis, cuando "los programas educativos deberían ser más propios de los centros públicos para crear cohesión y equidad".

"polémica gratuita"

El portavoz de IU, Adolfo Barrena, ha lamentado esta "polémica gratuita e improcedente" del Departamento de Educación, que todavía "está a tiempo de resolver" puesto que "no tiene más que cumplir las obligaciones" y gestionar la educación en Aragón, "planificando" y asumiendo "la mayor responsabilidad que es la pública".

El diputado de IU ha señalado que esta "polémica" se genera cuando está cerca el inicio del proceso de escolarización, "cuando padres y madres tiene que elegir cuál es el colegio que piden", hallándose los centros públicos con "falta de dotación, las aulas prefabricadas, equipamientos que no llegan y falta de becas" y ahora se añade "la indefinición de en qué centro se va a poder desarrollar el programa de bilingüismo".

En su opinión, con la normativa aprobada, en la "privada sí" va a haber bilingüismo, mientras que en la pública "el Departamento se lava las manos" y "les dice a los centros que lo resuelva con sus propios recursos", cuando ha dejado al profesorado "con más horas, masificación en las aulas, supresión de desdobles, y quitándole la posibilidad de formarse y reciclarse".

Ha añadió que el profesorado "sabe que el bilingüismo es básico" y por eso "reclama" al Departamento "que lo planifique, organice, resuelva y aporte recursos". Sin embargo, "no va haber dinero para auxiliares de conversación ni para formar a los profesores en idiomas" en la pública, donde actualmente disfrutan de este programa el 10 por ciento de los centros.

Por el contrario, en la escuela privada "pueden contratar a un profesor por tres horas" y ofrecer el programa, para recordar que la orden pide que en la pública el profesorado tenga destino definitivo y en la privada "solo hay que asegurar la permanencia del profesorado".

También ha criticado que se convocara al Consejo Escolar de Aragón (CEA) "de un día para otro" para debatir este nuevo programa, quien le planteó 28 propuestos "de mejora", que "no han sido tenidas en cuenta", como elaborar un programa "uniforme, no segregador, no a favor de la privada" y que se garantice desde la educación Infantil y pueda continuarse en Secundaria.